Aumenta rechazo por la fusión de los servicios Minsa-CSS

Manifestaciones, advertencias y diálogos aparentemente interminables son algunas de las muestras visibles del proceso de unificación del sistema de salud público a través del cual el Gobierno intenta frenar la dualidad de funciones que se da en la actualidad.

Uno de los primeros en alzar su voz ha sido la organización de jubilados y pensionados, cuyos miembros temen que sus derechos económicos sean vulnerados con este proyecto.

‘Estamos en alerta. No permitiremos que se ejecute ninguna unificación sin que antes se sanee el sistema existente, que está plagado de corrupción', indicó Eladio Fernández, representante de los jubilados.

El temor de los jubilados y pensionados persiste a pesar de que las autoridades han dicho que, tras la integración, se mantendrá andando el programa de Invalidez, Vejez y Muerte, bajo la administración exclusiva de la Caja de Seguro Social (CSS).

‘La atención de Salud es la única función que se unificará. La intención es buscar una armonía en el sistema para que no compita una institución con la otra y así poder tener mayor cobertura', indicó el viceministro de Salud, Miguel Mayo, en una entrevista concedida a La Estrella de Panamá.

Mientras en Ciudad de Panamá Fernández y su grupo de jubilados protestan, en Chiriquí, usuarios organizados de la CSS se oponen a la fusión, previendo que se desmejore la atención de servicios médicos.

El disgusto de los chiricanos emergió a inicios de esta semana, cuando se ordenó el cierre del ULAPS de Dolega (administrado por la CSS) para centralizar toda la atención médica de ese poblado en el nuevo Minsa-Capsi de Bugaba.

Las autoridades sanitarias de Chiriquí aseguraron que esta decisión ‘no está escrita en piedra'.

LOS AVANCES

Casi desde el primer día de gobierno del presidente Juan Carlos Varela, el Minsa y la CSS iniciaron las reuniones para evaluar los mecanismos de unificación del sistema sanitario panameño.

Para evitar el rechazo de las organizaciones de profesionales de la salud y pacientes, una de las primeras medidas tomadas por las autoridades fue la de convocar a un diálogo nacional para que estos pudieran expresar sus inquietudes y hacer sus propuestas.

Este diálogo, dirigido por el PNUD y financiado por el Gobierno, alcanza hasta ahora más de seis meses.

‘A finales de septiembre debemos haber finalizado todo el proceso de conversaciones y entregado al Gobierno una hoja de ruta', relató Julio Osorio, presidente de la Comisión Médica Negociadora Nacional (Comenenal).

De acuerdo con Osorio, las reuniones sostenidas hasta el momento han tenido resultados provechosos, aunque reconoce que uno de los más grandes obstáculos que enfrenta la mesa de diálogo es el tema financiero.

‘Todavía no abordamos el tema económico. Sabemos que será el que más tiempo nos tome, pero lo haremos teniendo como norte una integración que respete el derecho de todos', agregó el dirigente de la Comenenal.

En el diálogo por la salud participan 16 representaciones gremiales, profesionales y pacientes.

Los actores de estas conversaciones suman cerca de 60 personas.

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SISTEMA INTEGRADO

La experiencia de Costa Rica

Costa Rica es un modelo de integración sanitaria en la región. Antes de 1993, este país contaba con un sistema dual muy parecido al de Panamá. Una reforma sanitaria desembocó en un sistema de salubridad coordinado y centrado en la atención médica.

Antes de alcanzar este punto, el país pasó por un proceso como el que ahora realiza Panamá. Allá, los gremios se reunieron para hacer un diagnóstico del propio sistema, señalar los puntos débiles y buscar las mejoras.

El diálogo fue auspiciado por el Banco Interamericano de Desarrollo y, tras la aprobación de la Ley 7414, se definieron los roles de cada estamento de salud.

El sistema sanitario costarricense tiene como ente rector al Ministerio de Salud mientras que la Caja de Seguro Social se encarga de garantizar el buen funcionamiento de los hospitales y velar por la atención médica, además de garantizar las pensiones.

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RADIOGRAFÍA DEL SISTEMA

La salud panameña está ‘manchada' por falta de equidad.

90% de cobertura universal de salud, según la OPS, es el rango que maneja la CSS y el Minsa juntos en todo el país.

5,431 médicos están registrados en el sistema público panameño, según informes oficiales.