Idalia Martínez renunció al Senniaf

La directora de la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia (Senniaf), Idalia Martínez, presentó su renuncia al presidente de la República, Juan Carlos Varela.

Martínez estará en la dirección del Senniaf, según un comunicado de prensa de la Presidencia de la República, hasta el 15 de junio, porque el Presidente le aceptó la dimisión.

El pasado 27 de mayo, la Junta Directiva del Senniaf recomendó al presidente Varela, la destitución de la directora de la institución, por la pérdida de confianza.

Desde diciembre del año pasado, la directora había recibido fuertes críticas , luego de que fuera publicado un informe de la Comisión Evaluadora de la Adopción y las Normas de Protección a la Infancia y Adolescencia, que revelaba deficiencias, tanto en los procesos de adopción como en la implementación de políticas de niñez en la secretaría.

Posteriormente, Martínez fue querellada ante el Ministerio Público (MP) por dos madres, a quienes la institución despojó de dos menores bajo su tutela.

La Red Nacional espera que la designación que vaya a realizar el presidente Varela cumpla con los requisitos que están establecidos en la Ley 14 de 2009 y establezca políticas públicas que vayan acaorde a la niñez y adolescencia en Panamá.

Distintos sectores de la sociedad civil organizada habían solicitado su destitución en medio de acusaciones sobre malos manejos en Senniaf. Una de las primeras organizaciones solicitó su separación fue la Red Nacional de Apoyo a la Niñez y Adolescencia en Panamá (Rednaniap), en mayo pasado.

Martínez, quien estará en el cargo hasta el 15 de junio, acusó a Sor Lourdes, presidenta de Rednaniap, de ejercer tráfico de influencias en las adopciones que se dan en el hogar San José de Malambo. La acusación ocasionó la primera crisis pública de la todavía funcionaria.

A finales de 2015, en diciembre, otro informe puso en entredicho la labor que realiza Martínez al frente de la institución, que entre sus objetivos está el de proteger los derechos de la niñez y adolescencia, así como fortalecer las capacidades de la familia, mediante el desarrollo de programas, proyectos y acciones de tipo social.

El documento reveló que los procesos de adopción no se realizaban en el marco de la protección integral de las niñas y niños. Otro de los aspectos que se cuestionaba era el ‘exceso hermetismo' de la información pública sobre el tema.

El último episodio sobre las actuaciones de Martínez se registró la semana pasada, cuando la institución separó una menor de sus padres sustitutos, alegando que la familia no habían solicitado la adopción de la menor.