En el Día de las Madres

La sociedad está consciente de que el problema de la corrupción radica tanto en la Asamblea Nacional como en el Sistema de Justicia. Y no se trata de que la provocan, porque el flagelo nace en el empresariado, en el Gobierno y dirigido desde el Ejecutivo. De lo que se trata es de que, tanto la Asamblea como el Judicial, no hacen su trabajo fiscalizador y, en cambio, comen de lo que les dan desde la estructura de poder. Es un círculo vicioso que nos viene afectando desde hace años, porque opera a sus anchas hace ya muchos quinquenios. Si a esto sumamos que los corruptos ahora están organizados en bloques que, so pretexto de luchar por el bien del país, lo que hacen es luchar para llegar al poder y hacer lo mismo que hace el bloque rival, entonces la situación empeora. A toda esta estructura de pillaje hay que añadirle algunos frentes de lucha que también tienen un modus operandi bien definido, porque su lucha es solo la protección de los intereses de cualquiera de los bloques a los que corresponda. Estos frentes están camuflados en gremios, partidos políticos, asociaciones y hasta movimientos de personas que dizque luchan por ‘conseguir mejores medicamentos'. Hoy, conmemoramos el Día de las Madres y bien podríamos hacerle una promesa a todas esas mujeres que nos trajeron al mundo de que rescataremos el país de esta lacra que nos carcome los cimientos de nuestra sociedad. Que podemos hacer un alto y decidirnos a desenmarañar toda esta podredumbre de una vez por todas. ¡Salud y que vivan las madres!