Así será el ‘Alligator Alcatraz’: el nuevo centro de detención para migrantes de Florida

Florida inicia la construcción del polémico “Alligator Alcatraz”, un centro de detención para migrantes en los Everglades, impulsado por aliados de Trump y con un costo anual de 450 millones de dólares.

Una instalación que promete ser tan temida como polémica. Ubicada en un aeródromo remoto en los Everglades y rodeada de caimanes, pitones y otros animales salvajes, esta nueva prisión migratoria forma parte de la estrategia del expresidente Donald Trump para intensificar su política de deportaciones masivas.

Un “Alcatraz de los caimanes” en plena naturaleza salvaje

El centro, compuesto por tiendas de campaña de gran tamaño, estará situado a unos 70 kilómetros de Miami. La idea es aprovechar la fauna salvaje de los Everglades como parte del sistema de seguridad natural, lo que reduciría la necesidad de vallas, personal armado o tecnología avanzada.

Según James Uthmeier, fiscal general de Florida y uno de los principales impulsores del proyecto, “el estado no tendrá que invertir mucho en seguridad porque los caimanes y las pitones ya hacen ese trabajo”.

Costos millonarios y financiamiento federal

El centro tendrá un costo operativo estimado de 450 millones de dólares anuales, aunque el estado planea solicitar un reembolso a la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA), a través de fondos creados durante la administración Biden para apoyar a jurisdicciones que atienden a migrantes.

La vocera del Departamento de Seguridad Nacional, Tricia McLaughlin, confirmó que Florida podría acceder a este financiamiento, a pesar de las críticas previas de Trump a cómo se usaban esos recursos, especialmente en ciudades como Nueva York.

Parte de una estrategia nacional de deportaciones masivas

Esta instalación en Florida forma parte de una red nacional de centros de detención que busca aumentar la capacidad de retención de migrantes en todo el país. El objetivo, según funcionarios de la administración Trump, es añadir al menos 5.000 camas adicionales en centros de detención, lo que permitiría acelerar el proceso de deportaciones.

Actualmente, el gobierno de Trump mantiene detenidos a más de 55.000 migrantes, un aumento significativo en comparación con los cerca de 40.000 retenidos al final de la administración Biden.

Críticas de defensores de derechos humanos

El anuncio ha generado duras críticas de organizaciones defensoras de los migrantes. Mark Fleming, del Centro Nacional de Justicia para los Inmigrantes, calificó el proyecto como un “sistema de detención independiente y sin rendición de cuentas”. También advirtió sobre los riesgos de albergar a miles de personas en tiendas de campaña bajo el calor extremo del verano floridano, sin un plan claro de atención médica o servicios básicos.

“El simple hecho de que consideren construir una instalación de esta magnitud, en tan poco tiempo y sin un plan operativo detallado, demuestra un insensible desprecio por la salud y la seguridad de los migrantes”, expresó Fleming.

¿Cuándo estará listo el Alligator Alcatraz?

Aunque no hay una fecha oficial de apertura, las primeras tiendas podrían comenzar a funcionar en julio, según declaraciones de McLaughlin. Sin embargo, la alcaldesa del condado de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, pidió al estado más tiempo para evaluar el impacto del proyecto.

En una carta enviada a la División de Gestión de Emergencias de Florida, Cava expresó su preocupación por la falta de comunicación y el ritmo acelerado de la construcción.

Durante su primer mandato, Trump propuso construir un foso con caimanes y serpientes en la frontera sur para disuadir la migración. También pidió muros con pinchos, pintura negra y alambre de púas para maximizar el miedo. Este nuevo centro en los Everglades parece inspirarse en esa misma lógica.

“Estamos trabajando a velocidad turbo para ofrecer soluciones rentables e innovadoras que respondan al mandato del pueblo estadounidense: deportaciones masivas de extranjeros ilegales”, declaró Kristi Noem, secretaria de Seguridad Nacional.

Con información de New York Times