Harley Mitchell: 'El tema de cerro Patacón es de naturaleza compleja'

En las proximidades del cerro Patacón la pestilencia, los lixiviados y las alimañas invaden. El relleno sanitario ya colapsó y la basura se ha convertido en el mayor foco de contaminación de Panamá y San Miguelito.

El cerro Patacón está ubicado en el corregimiento de Ancón, distrito de Panamá, donde más allá del problema del vertedero en sí, hay una situación de riesgo ambiental, social y de salud que el gobierno debe resolver cuanto antes.

Se trata del mayor vertedero de Panamá y sirve a la capital del país. Cerro Patacón inició sus labores al inicio de los años ochenta con una esperanza de vida estimada de entre 25 a 30 años, basado en el crecimiento que llevaba la ciudad y la cantidad de basura que se generaba en ese entonces.

Según datos oficiales, en el relleno sanitario se dispone más del 40% de toda la basura generada en la República de Panamá, un país de 4.28 millones de habitantes.

Pero el periodo de vida del vertedero “ya terminó hace rato”, expresó el investigador y sociólogo Stanley Heckadon, quien se remontó a lo que viene observando desde hace veinte años en donde “lo que era un caserío mínimo, Mocambo y Patacón, ahora son barrios de invasión grandísimos y la basura ya casi se desborda cayendo a la autopista Panamá-Colón”.

Sin embargo, su situación se ha convertido en insostenible y todo se complica en momentos en que a Urbalia Panamá, S.A. se le acaba el tiempo del contrato concesión y todavía no se define el futuro del sistema de disposición y manejo de desechos. 

El periodo de concesión de la administración de Patacón concluye en marzo de 2023, confirmó este domingo 29 de enero en el programa Radar de Televisora Nacional , el secretario general de la Autoridad de Aseo Urbano y Domiciliario (AAUD), Carlos Ábrego. Esto, con base en la fecha en que se dio la orden de proceder del contrato 489-2008 firmado en ese año, cuando todavía no existía la Autoridad.

Indicó que la ejecución de la AAUD en el vertedero ha estado sujeta a este contrato: “Tenemos que respetar las cláusulas que se tocaron en su momento y lo que sí hemos hecho es una mejor supervición y un trabajo interinstitucional tanto con el Ministerio de Ambiente (MiAmbiente) como con el Ministerio de Salud (Minsa)".

El vertedero de cerro Patacón surgió para los años de 1980 cuando se cerró el vertedero de Panamá viejo, y lo opera el Estado, pero en el 2008 en Concejo Municipal se toma la decisión (en ese tiempo la gestión de los desechos en Panamá todavía pertenecía al Municipio de Panamá) de otorgar en concesión a Urbasel Protosa, empresa española que firma el primer contrato y posteriormente, dos años después (con el cambio de gobierno), entró Urbalia. Se hicieron las adendas y funcionó bajo el mismo contrato inicial.

El próximo paso, vencido el contrato de concesión, dijo Ábrego, es implementar ciertas acciones para poder tomar la operación. El equipo se prepara para el 27 de marzo.

El alto funcionario dijo que se analizan todos los escenarios, y tiene que ser de forma interinstitucional porque se está hablando de ciertos “manejos complejos” como los gases, la protección de los cuerpos de agua, incluso la protección del personal que actualmente trabaja para la empresa, que se garanticen que sus derechos sean respetados.

Ábrego adelantó que se están preparando en esa fase intermedia, mientras se tome la decisión a nivel de Estado sobre qué tecnología y qué infraestructura se va a llamar a licitación para la construcción. “Sabemos que este va a ser un proceso que puede tomar, en el tema de construcción y operación, entre año y año y medio. Tenemos que prepararnos para lo que tenemos, tampoco somos partidarios de cavar ninguna trinchera fuera de ese escenario ya impactado, [la idea es] poder hacerlo lo más óptimo y que nos permita garantizarle al distrito de Panamá y San Miguelito un lugar donde disponer los desechos”, expresó Ábrego.

Para el abogado ambientalista, Harley Mitchell, el “tema de cerro Patacón es de naturaleza compleja”, pues su ámbito no se circunscribe a los límites del mismo cerro Patacón, si no que es un sistema de disposición, recolección, transporte y disposición final de desechos producto de la sociedad panameña.

“Este sitio al que nos referimos es el depositario final de desechos que no se disponen bien, no se recogen bien y no se transportan bien. Así que pretender que el sitio de disposición final se encuentra bien, es ilusorio, especialmente porque su manejo desde hace poco más de una década se ha encontrado al vaivén de fuerzas políticas que administrativamente no le dan importancia a la gestión ambiental de la ciudad”, aseveró.

Por tanto, Mitchell agregó que “su fracaso no solo está anunciado sino que sus consecuencias ya son patentes no solo en la ciudad de Panamá sino también en sus áreas de cinturón como: San Miguelito, Chilbre, Panamá Oeste e incluso esto afecta a otras provincias y cabeceras y provincias del país”.

“El problema es muy grave y los gobiernos no han tomado (una decisión), el gobierno pasado incluso hasta redujo la cantidad de kilómetros (kilómetro y medio) el límite hasta donde podían vivir las personas, de un relleno sanitario. Entonces, es inconcebible porque esto afecta la salud de las personas y la arriesga”, sentenció el abogado.

En marzo de 2021, la Dirección General de Salud Ambiental del Minsa anunció que detectó cinco comunidades asentadas en las proximidades del relleno de Cerro Patacón, zona que "no es  apta" para vivir por malos olores, lixiviados y alimañas.

Las cinco comunidades detectadas por el Minsa, asentadas en las proximidades del relleno sanitario son: Cuipo 1, Cuipo 2, El Relleno, La Isla y Calle 50. Se instaló una mesa de trabajo para definir qué casas deben salir de la zona.

Harley se remontó al 2009 cuando cerro Patacón todavía era administrado por el Municipio de Panamá. Recordó que alrededor del mundo, los municipios son los entes locales que brindan los servicios a la sociedad entre ellos el servicio de recolección y disposición final de desecho.

Sin embargo, en el caso panameño, la normativa jurídica así lo determina, pero con la creación de la Autoridad de Aseo Urbano Domiciliario (AAUD), a través de la Ley 51 de 2010 se le arrebata ese derecho al Municipio de Panamá, el más grande y desarrollado del país. Al principio con un presupuesto lo suficientemente grande como para poder tratar la recolección de basura, dijo.

Según el abogado, el transporte y la disposición de la basura en cerro Patacón contaba con una auditoría ambiental, un instrumento aprobado por el Ministerio de Ambiente, para encontrar los defectos en el manejo del sitio por parte de la empresa concesionaria, guiada por supuesto y el titular de la AAUD, conforme a las normas ambientales, pero con el pasar de los gobierno, el tema de la auditoría se olvidó. “No se ha escuchado a ningún medio de comunicación, a ningún interlocutor social que no sea yo mencionar el tema de la auditoría. La AAUD cesó de tener un presupuesto suficiente para poder tratar todos estos menesteres”, manifestó Mitchell. 

Recordó que la AAUD para poder manejar todo lo que se le ha encomendado requiere de un presupuesto, como ellos mismos lo propusieron desde hace ya dos o tres años, de $120 millones, para poder pagar el tratamiento del cerro Patacón, transportar los desechos allá y mantener su burocracia administrativa, pero de manera no coincidencial, ese presupuesto se redujo a menos de la mitad.

Por lo tanto, ”la AAUD no puede hacer más que mantener su propia burocracia y a raíz de ello el cerro Patacón se encuentra prácticamente sin ningún tratamiento, es un depósito de desechos muy similar a los depósitos de residuos que existen en el interior de la república sin mayor tratamiento que tirarle tierra constantemente y de vez en cuando quemarlo y permitir su quema, cosa que a la vez contamina”, afirmó el abogado.

(Continuará en la edición de mañana 1 de febrero).