Algunos hábitos de los que se resisten a morir

Lo que empezó en 2004 como un proyecto de National Geographic para encontrar las comunidades más longevas del mundo, se convirtió en una investigación para develar el secreto para una larga y saludable vida.

Para 2009, Dan Buettner del National Geographic Society y el demógrafo Michel Poulain habían detectado cinco lugares con altas concentraciones de personas centenarias, que vivían libres de las enfermedades crónicas más comunes en la vejez.

Estos lugares, a los que denominaron blue zones o zonas azules, eran: Icaria, Grecia, Okinawa, Japón, la región Ogliastra en la isla de Cerdeña, Italia, Loma Linda, California y la Península de Nicoya en Costa Rica.

Así, un grupo de investigadores médicos, antropólogos, nutricionistas, demógrafos y epidemiólogos se dio a la tarea de descifrar qué factores en común tenían estas comunidades, que promovían una larga vida saludable.

Según describe Buettner en su libro The Blue Zones Solution descubrieron que la clave de la longevidad es una mezcla del ambiente, la alimentación y la comunidad.

Estas personas realizan mucha actividad física natural, como caminar de un lado a otro; tienen un sentido de propósito en la vida; mantienen rutinas de relajación; comen hasta sentirse satisfechos y no hasta la saciedad, cenan temprano y siguen una dieta mayormente a base de plantas; viven en comunidades que promueven estilos de vida saludables, como dice el refrán ‘dime con quién andas y te diré quién eres'; practican y son parte de alguna comunidad de fe; le dan prioridad a sus familias; y toman vino todos los días.

BEBIENDO SALUD

Según Buettner, la regla general de las zonas azules es café por las mañanas, té en la tarde, vino al anochecer y agua todo el día. Las sodas u otras bebidas azucaradas no forman parte de su dieta.

El agua no solo regula las funciones básicas del cuerpo, sino que previene la deshidratación que contribuye a los coágulos de sangre.

En cuanto al café, estudios han encontrado que puede proteger contra la diabetes, el Parkinson, ciertos tipos de cáncer y la senilidad.

En la mayoría de las zonas se consume de una a tres copas de vino tinto al día, usualmente con la comida y en compañía de amistades, lo que contribuye a niveles saludables de colesterol y protege contra otras enfermedades crónicas.

LOS TÉS DE GRECIA

En la mayoría de las zonas se encontró el té como parte de la dieta, lo cual puede proteger contra ciertos tipos de cáncer y problemas cardiovasculares.

Sin embargo, el ‘té' en Icaria Grecia, no era exactamente de la planta del té, al cual se le atribuyen los beneficios mencionados. Los ancianos de la isla hacían infusiones con hierbas cosechadas de su jardín, como la menta, el romero, la salvia, el diente de león y el orégano.

Qué beneficios ofrecen estas infusiones?

Según el libro, el romero ha demostrado proteger contra el cáncer en algunos estudios. Una experta en propiedades de las hierbas señaló que la menta se utiliza en Grecia para el sistema digestivo. Además, en un análisis de las demás hierbas en su laboratorio, encontró que varias de ellas poseían propiedades antioxidantes y un leve efecto diurético, ayudando a controlar la presión.

Aquí en Panamá se pueden encontrar varios sitios que venden mezclas de hierbas para estas infusiones. Entre ellos está Chez Titi, un salón de té y restaurante con una visión holística de la salud.

‘Nosotros usamos varias de estas infusiones de hierbas y las mismas hierbas frescas en sí dentro de nuestras recetas', contó la chef y nutricionista holística Yvonne Weiss ‘Titi' de Miguel a La Estrella de Panamá .

Muchas de estas hierbas comparten las mismas propiedades preventivas, nos explicó. Por ejemplo, una infusión de romero puede ser beneficiosa para la mujer en la menopausia, para la presión o la digestión.

Con sus conocimientos en nutrición, la chef hace mezclas personalizadas para sus clientes, dependiendo de las necesidades de cada uno. Algunos llegan buscando las infusiones naturales para relajarse —que puede tener mezclas de manzanilla, lavanda y hierba de limón—, para la migraña, para la digestión, entre otras cosas.

Nos recuerda, sin embargo, como Buettner, que aunque las infusiones de hierbas tengan propiedades beneficiosas, una buena salud depende de muchos otros factores, como la alimentación, la actividad física y el ambiente.