La avena, beneficiosa para todos

La avena es un ‘superalimento' que no pasa de moda. Esto es porque contiene propiedades beneficiosas a la salud para muchas personas.

La nutricionista Yakeydi Rodríguez explica que para aprovechar mejor el contenido nutricional de este grano integral se recomienda prepararlo con agua o con leche descremada y no más de una cucharada de azúcar morena. También sugiere mezclarlo con frutas y agregarlo a batidos o a yogurts.

FIBRA Y SALUD

Debido a su buena cantidad de fibra soluble, la avena ayuda a digerir los alimentos y regula el sistema digestivo.

Según la nutricionista, este tipo de fibra no solo puede prevenir el estreñimiento —y por consiguiente el cáncer colorectal— sino que también permite estabilizar los niveles de azúcar en la sangre.

‘La avena posee carbohidratos de absorción lenta', agrega Rodríguez. ‘Lo que permite un efecto de saciedad más prolongado'.

Esta propiedad es de interés para personas con diabetes y quienes desean mantener su peso o perder algunas libras de manera paulatina y saludable.

A su vez, es una buena opción en el desayuno para quienes sufren de niveles altos de colesterol ‘malo' (LDL) en la sangre.

‘Gracias al ácido linoleico y fibra que posee, la avena impide que el colesterol pase al intestino', detalla la dietista. ‘Al mismo tiempo, la fibra va barriendo los depósitos de grasa que se acumulan en las paredes de las arterias'.

El mantener controlados los niveles de LDL en la sangre, protege al cuerpo de desarrollar presión alta o sufrir de un infarto u otro problema cardiaco.

Además de la fibra, la avena contiene vitaminas del complejo B, que son esenciales para el correcto funcionamiento del cerebro y el sistema nervioso.

Avena terapéutica

Dado que la propiedad más conocida de la avena es la reducción de los niveles de colesterol, la nutricionista señala que, según estudios, se requieren 3 gramos de beta-glucano (la fibra soluble de la avena) por día para lograr este propósito.

‘Esta sería la cantidad presente en una taza de avena integral cocida, una y media tazas de avena cocida o tres tazas de avena instantánea', aclara.

Si el propósito es este, Rodríguez expresa que el cereal se debe consumir por aproximadamente 30 días seguidos antes de volver a evaluarse con exámenes de laboratorio.

Pero más allá de consumir avena, la dietista sostiene que la población debe adoptar otros estilos de vida saludables. Por ejemplo, consumir más de ocho vasos de agua y cinco porciones de frutas y vegetales al día, hacer actividad física mínimo 30 minutos tres veces por semana, y tener una alimentación baja en grasas saturadas, azucares simples y sal.

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‘Gracias al ácido linoleico y fibra que posee, la avena impide que el colesterol pase al intestino',

YAKEYDI RODRÍGUEZ