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Rafael Devers, un pelotero que promete
Actualizado
- 11/06/2021 00:00
Creado
- 11/06/2021 00:00
No es extremadamente mediático, pero sí muestra con claridad el acentuado valor que tiene. Devers puede convertirse, con el andar del tiempo, en esa figura de la que se hable con emoción y deleite, tras su adiós a los parques.
Desde hace cuatro años, los Medias Rojas de Boston cuentan con los servicios de un joven pelotero dominicano, Rafael Devers (nacido el 24 de octubre de 1966 en Samaná República Dominicana), quien estuvo desde 2014 en el sistema de las menores reuniendo buenos números, sobre todo en %SLG (.484): en 1,580 turnos un total de 177 extrabases, así como aceptables valores de fildeo cubriendo la antesala (PF de 0.937 y RF/9 de 3.01).
Según reseña el portal especializado offradranch.com los Medias Rojas firmaron a Devers como un agente libre de 16 años con un contrato de $1,5 millones.
Comenzó con las ligas menores y debutó con el club de novatos de los Red Sox de la Liga Dominicana de Verano el 31 de mayo de 2014.
La altura y el peso de Devers se miden a 6 pies (1,83) y 95 kg. (210 lb.) respectivamente. Lo apodan 'cara de bebé', pero tiene el tamaño del cuerpo de la liga mayor para ayudarlo a competir directamente en la MLB.
El pelotero dominicano ha aclarado su filosofía básica como jugador de béisbol: “Quiero que mi nombre sea recordado cuando me retire”.
El pelotero creció admirando a Manny Ramírez y a Pedro Martínez, lo que fija el rumbo de lo que desea hacer en los diamantes.
Devers llegó al equipo grande un 25 de julio de 2017, en un encuentro frente al equipo de los Marineros de Seattle. Cubrió la tercera y bateó de noveno: 2-0, con 2 BB y su primera anotada. Al final SEAT se llevaría la victoria 6-5.
En ese 2017, Devers vio acción en 58 juegos, conectando 14 dobles y 10 jonrones para un línea de: 383/482/819 con OPS+ 112.
Para el año 2019 su OPS+ escaló a 133 (tras un descenso algo decepcionante el año previo, 0PS+ de 94) logrando para su equipo 54 dobles (líder de liga ), 4 triples y 32 jonrones y fletando 115 carreras.
En esa cosecha Devers alcanzó el liderato total de bases de la americana (359), logrando ser casilla 12 en la elección para MVP. Comenzaba de esta manera a aparecer en el radar de los entendidos.
En la presente campaña está teniendo su mejor temporada en las mayores. Una de ensueño: 31 extrabases, 43 remolcadas, .927 de OPS y 152 de OPS+. Es, además, líder en dobles (17), cuarto en jonrones (14) en la americana.
Todos estos valores han contribuido considerablemente a que los Medias Rojas estén peleando el liderato de su división con Tampa y los Yankees.
Con cuatro años y fracción, ya Devers cuenta con los siguientes méritos y logros, adicional a los señalados:
1 premio al pelotero del mes.
1 premio al pelotero de la semana.
1 temporada con + 200 hits.
1 temporada de + 30 Jrs .
1 temporada de + 100 impulsadas.
Líder (2019) en extrabases (90).
En la Serie de Campeonato 2018 vs Houston bateó para un OPS de 1.082.
Ganó junto a Boston, la Serie Mundial 2018.
¿Juego de Estrellas?
Extraña sobremanera que con todos estos logros no haya sido llamado Devers al juego de Estrellas.
Los cronistas de Boston dicen de Devers (y también Xander Bogaerts,) que cuando entra a la caja de bateo se ve cómodo y la confianza “se derrama como vapor”. Así de temible es el de República Dominicana con el bate.
Detengámonos en una medición, que nos hace vislumbrar lo valioso de Rafael Devers:
En sus primeros 438 juegos ha disparado 212 extrabases, comparemos con los extrabases conectados por grandes figuras de los Medias Rojas en ese mismo número de cotejos iniciales:
Mookie Betts 207.
Fred Lynn 189.
Carl Yastrzemski 169.
Algunos periodistas deportivos han comparado a Devers con Adrián Beltré, seguro Salón de la Fama para enero de 2024. En sus primeros 439 juegos en las Mayores, Beltré conectó 139 extrabases. Impulsó 211 carreras y anotó 204. Por su parte, en el mismo número de encuentros, Devers lleva 216 extrabases, 297 impulsadas y un total de 286 carreras anotadas.
Pese a que no ha sido para nada mediático, en forma callada y continua viene Devers sumando logros y merecimientos que apuntalan a su divisa, un equipo de leyenda que ha tenido grandes peloteros a lo largo de su historia.
Devers puede convertirse, con el andar del tiempo, en esa figura de la que se hable con emoción y deleite, tras su adiós a los parques. Un grande.
Queda camino por andar. Allí va Rafael Devers, creciendo y rompiendo paradigmas.
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