El creador de contenidos y escritor conversa con este medio sobre la lengua y la incorporación de nuevas palabras al español. Habla un poco de su vida,...
- 28/10/2012 03:00
PANAMÁ. El boxeo colombiano celebra hoy, domingo, 40 años de la conquista de su primer campeonato mundial a manos del popular Antonio Cervantes, ‘Kid Pambelé’.
Era precisamente en el entonces llamado gimnasio ‘Nuevo Panamá’ (hoy Roberto Durán) y ante el panameño Alfonso ‘Pepermín’ Frazer que Cervantes cambiaría la manera de ver el pugilísmo por los colombianos.
El 28 de octubre de 1972, el púgil subió al tinglado en busca del cinturón superlijero (140 libras) de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) con al menos 15 mil panameños apoyando al monarca Frazer.
El oriundo de San Basilio de Palenque en el departamento colombiano de Bolivar, sorprendió a los presentes al propinarle un KO al púgil de casa en el décimo de los 15 asaltos programados.
Hoy, a sus 67 años de edad ‘Kid Pambelé’ en la comodidad de su hogar recordó los pasajes de su carrera en el deporte de las narices chatas y orejas de coliflor con el diario colombiano El País de Cali.
¿Qué pasó después de ganar el título?
‘Lo defendí varias veces, después en 1976 lo perdí ante Wilfredo Benítez, de Puerto Rico; pero lo recuperé rápido porque el papá de Wilfredo no quiso firmar la revancha’.
Lo recuperó, pero lo perdió para siempre en 1980 ante Aaron Pryor...
‘A esa pelea llegué mal preparado; yo vivía en Caracas y ya andaba de joda (desorden), metiendo droga y licor. Ni Ramiro Machado, el empresario, ni ‘Tabaquito’ Sáenz, mi entrenador, me podían localizar. Llegó el día de la pelea y perdí. Pryor era buen boxeador, pero si yo hubiera estado bien preparado, seguro que le gano’.
Después de esa derrota, ¿por qué decidió seguir en las drogas y el licor?
‘"Bueno, en esto influyen mucho los malos amigos, el que invita a todos lados y el que te ofrece de todo; ya estaba muy metido en eso y no había forma de parar’.
¿Y hoy cómo está?
‘Me siento bien, tengo dos años sano, que no pruebo nada; mantengo en mi casa de Turbaco, veo televisión y los noticieros de la noche y me acuesto entre 9 y 10 de la noche; me levanto a las 7 de la mañana y si no tengo que hacer alguna vuelta en Cartagena, prefiero quedarme en la casa’.
¿Qué le dejó el boxeo?
‘Las cosas materiales que tenía las perdí todas por estar metido en las drogas y el alcohol; en esa época gastaba mucho, no le paraba bola a nada; se me acercaba demasiada gente, andaba con muchas mujeres... pero todo eso se fue perdiendo; nunca recuperé lo que perdí’.
¿Siente que la gente aún lo recuerda?
‘Sí, eso es un orgullo grande; a mí me reconoce el rico, el pobre... hasta el gamín (indigente) sabe quién soy yo; por donde quiera que pase la gente me quiere y me saluda’.
¿Ve boxeo por televisión?
‘Sí, me emociono cuando veo alguna pelea, pero el boxeo de ahora no es como antes que había buenos peleadores, buenos campeones mundiales; cualquiera ahora es campeón porque hay muchas organizaciones. Un muchacho, con 10 o 15 peleas, llega a campeón mundial’.
La popularidad y hazaña de ‘Pambelé’, permitió que el gobiermo de aquel entonces instalara servicio de alcantarillado a su humilde municipio.
Pambelé, único colombiano miembro Salón de la Fama en Canastota, Florida, reside junto a su esposa, varios hijos y nietosen una finca Turbaco, municipio de la costa caribeña de Colombia.