Caso Floyd se ‘enmarca en una situación estructural de discriminación’, CIDH

La Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH) consideró que el asesinato de George Floyd en Minneapolis, Estados Unidos, y que ha generado diversas protestas se enmarca en una “situación estructural de discriminación más amplia contra personas afroamericanas” en Estados Unidos que debe ser atendida y erradicada.

En un comunicado divulgado esta semana, la CIDH expresó su preocupación por la situación de desigualdad y discriminación en la que históricamente se ha encontrado la población afroamericana y que, entre otras consecuencias, ha limitado su acceso a la justicia y al goce a la igual protección bajo la ley.

El asesinato del afroamericano Floyd ha generado protestas en 75 ciudades de Estados Unidos, según cifra de organismo, al igual que en otras partes del mundo.

“Estas protestas han derivado en enfrentamientos, saqueos, incendios, daños a vehículos policiales, a establecimientos estatales y a la propiedad privada. La CIDH rechaza estos hechos de violencia por tratarse de conductas incompatibles con el derecho a la protesta pacífica”, señaló el organismo.

El organismo recordó que en marzo pasado Breonna Taylor, una mujer afroamericana, falleció al recibir disparos por tres miembros de la policía cuando entraron en su casa en Louisville, Kentucky, lo que también generó protesta. Además de que el pasado 27 de mayo, siete personas habrían resultado heridas de bala en hechos aún no esclarecidos.

La CIDH cita un informe del National Police Violence Map, en la que da cuenta que durante el año pasado, 1099 personas habrían perdido la vida a manos de la policía, de las cuales el 24% era afrodescendiente. Este grupo, agrega, constituye el 13% del total de la población del país norteamericano.

La CIDH urge a Estados Unidos a adoptar medidas legislativas, de política e institucionales coordinadas y encaminadas a erradicar la discriminación racial y a capacitar a los miembros de los sistemas judiciales, cuerpos armados y organismos de seguridad sobre los principios y normas de protección de los derechos humanos. Además capacitarlo sobre los límites a los que debe estar sometido en toda circunstancia el uso de las armas por parte de los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley.

La CIDH, un organismo de la Organización de los Estados Americanos, consideró que el uso de la fuerza debe ajustarse a principios de excepcionalidad, necesidad y proporcionalidad.

Adicional, el uso de armas menos letales debe ser estrictamente regulado. Todo incidente que haya implicado el uso de cualquier tipo de armas por parte de las autoridades debe ser registrado, haya o no afectado la integridad de alguna persona.

La Comisión al mismo tiempo que hace un llamado para que las protestas sean pacífica, pide al gobierno norteamericano continuar con las investigaciones de manera exhaustiva, imparcial, efectiva y pronta, así como sancionar judicialmente a todas las personas que resulten responsables y a dotar de una reparación integral a las familias.