Metrobús: entre la transformación y la cultura del ‘diablo rojo'

Actualizado
  • 18/08/2018 02:00
Creado
  • 18/08/2018 02:00
La empresa empezó a aplicar la codificación para las distintas rutas en el área norte.

El sistema de transporte masivo de pasajeros metrobús pasa por un proceso de modernización y la empresa pública que lo administra, MiBus, se enfrenta a la idiosincrasia del panameño.

Después de ocho años de que el sistema metrobús reemplazó a los ‘diablos rojos', los usuarios no terminan de asimilar en su totalidad el modelo de operación. La modalidad de transbordo, por ejemplo, no convence en su totalidad a los usuarios, a pesar de que ofrece beneficio en tiempo y dinero.

Por pereza o por resistirse a tomar varios buses para alcanzar el destino final, los usuarios no usan este esquema que ‘produce ganancia en tiempo y pasaje', afirma Carlos Sánchez, presidente de la Junta Directiva de MiBus.

René Aguirre, especialista en planeación de la empresa, lo explica con un ejemplo que vivió un compañero de trabajo. Aguirre dejó en Plaza Edison a un compañero de trabajo que se dirigía hacia Mano de Piedra, por la ruta del Corredor Norte.

EL SISTEMA EN CIFRAS

Metrobús moviliza 166 millones de pasajeros al año.

Los usuarios de las rutas de los corredores se incrementaron un 100% este año.

La empresa cuenta con sus propios talleres, autorizados para el revisado vehicular de su flota.

En Plaza Edison, el hombre se subió al primer bus para bajarse en la parada del Complejo Metropolitano y de allí tomar un bus directo a la terminal de Albrook. A pesar de que por Plaza Edison pasan buses directos a Albrook, decidió viajar hasta la parada del Complejo Metropolitano, porque allí tiene la opción de los buses de Transístmica y Tumba Muerto, lo que representa que el tiempo de espera de un metrobús es menor porque se cuenta con dos opciones, en vez de una.

Esperó poco, en efecto. Viajó en el metrobús hasta Albrook —ya había pagado en el primer trayecto— y al llegar hasta la terminal, abordó el metrobús del Corredor Norte, en el cual solo pagó $0.50.

Cuando se hace dos transbordos, los usuarios solo pagan por el primero. Si son tres, solo lo hacen por el más costoso. Este caso, el sistema cobró por el servicio de corredor, que es de $0.75. Cabe recordar que al bajar del autobús, se debe validar la tarjeta en la puerta de salida. A partir de ese momento, tiene 40 minutos para hacer uso del beneficio.

La empresa busca fortalecer el mecanismo de transbordo y cambiar la cultura de la ciudadanía que por décadas se acostumbró a tomar un solo bus desde el lugar de origen hasta el destino final, como lo ofrecían los ‘diablos rojos'.

El escenario ahora es distinto y MiBus, aunque ofrece los servicios de trayectos largos, también tiene recorridos más cortos con la finalidad de agilizar el servicio. Como se hace en las grandes ciudades del mundo, dice Sánchez.

La transformación del sistema de transporte también está en proceso de establecer rutas que ya no serán nombres de lugares —algunos de los cuales han dejado de existir— para convertirse en códigos de cuatro dígitos: una letra y tres números. Los usuarios deberán identificar el metrobús de su destino por estos códigos. Cada ruta estará identificada con un color.

El modelo se empezó a aplicar en Chilibre, como un plan piloto. La empresa proyecta implementarlo en noviembre, acompañado con un mapa esquemático del sistema de transporte, que estará visible en las zonas pagas y en las paradas ( ver gráfica ).

A pesar de que el metrobús realiza recorridos por la línea del Metro, para los representantes de MiBus los dos sistema no compiten, sino que se complementan. Incluso, hay personas que prefieren utilizar el metrobús, aunque circule por la misma ruta del Metro, porque los lugares establecidos como paradas varían mucho.

Lo Nuevo
comments powered by Disqus