Francisco dice a los jóvenes que no se puede ser como los que construyen muros

Los jóvenes del mundo le dieron la bienvenida la tarde de este jueves al Papa Francisco en la Cinta Costera, bautizada como Campo Santa María la Antigua en medio de un festival de música, danza y un desborde de emoción y alegría.
Llantos de emoción se vivieron entre los cientos de jóvenes que se apostaron desde primeras horas de la mañana en la cinta Costera para reservar un lugar que les permitiera ver de cerca al papa.

En un aparente cuestionamiento a la política migratoria del presiente de los Estados Unidos, Donald Trump, el papa Francisco destacó que a pesar de las diferencias de ropas, idiomas, culturas y otras cosas que los diferencian, no se pueden ser como aquellos que construyen muros para distanciarnos por el contrario, pidió construir puentes para estar más cerca.

Hay que "desmentir y desautorizar" a esos "constructores de muros que buscan dividir sembrar miedo".

Esta no sería la primera vez que Francisco cuestiona la intención del presidente Donald Trump de consruir un muro en la frontera con México para frenar la migración. Ya en febrero del 2016 dijo que no es crsitiano sembrar divisiones.

También en su vuelo hacia Panamá volvió a cuestionar la intención de dividir la frontera de los Estados Unidos con México con un muro.

Francisco preguntó más de una vez a los jóvenes si querían ser constructores de puentes y no de muros. Y les dijo responan "quieren ser constructores de muros", a lo que los jóvenes respondían a coro "queremos ser constructores de puentes".

Antes de su discurso, el papa Francisco hizo un recorrido por la cinta costera en el papamóvil en el que saludó de cerca a los jóvenes asistentes.

En el acto, Francisco recibió los símbolos de la JMJ y un mensaje en cada uno de los idiomas de los participantes en la actividad, además de un obsequio que le entregaron personalmente el futbolista Felipe Baloy y el nadador César Barría.

El Sol sofocante a la orilla de la cinta costera no fue impedimento para que los jóvenes esperaran pacientes para dar la bienvenida al papa.
Antes de la ceremonia, un grupo de jóvenes de Venezuela se pasearon con una pancarta con los colores de la bandera de Venezuela en la que se podía leer en inglés "pray for Venezuela" (reza por Venezuela).

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