Fiscalía de Cuentas investigará compra de comida deshidratada

Una posible lesión patrimonial, superando los 14.5 millones de dólares en el segundo informe de auditoría, que guarda relación con la primera compra de alimentos deshidratados por parte del Fondo de Inversión Social (FIS), actual Programa de Ayuda Nacional (PAN), será investigada por la Fiscalía General de Cuentas.

El informe practicado entre el 1 de julio de 2009 y el 31 de agosto de 2011, constató que la empresa contratista vinculada entregó al FIS los alimentos deshidratados para su distribución, no obstante, el acto de contratación reveló irregularidades tales como competencia simulada, debido a que estuvo encaminado a que le fuese otorgado a la empresa, la cual tenía conocimiento de la adjudicación del programa con seis (6) meses de antelación.

De acuerdo a la Fiscalía General de Cuentas dentro de la auditoría se evidenciada la inexistencia de estudios de factibilidad que avalaran la conveniencia económica y técnica del proyecto, así como el pago de viáticos por B/. 3,600.00 sin justificación; las fechas de los viajes realizados por el jefe del Departamento de Nutrición del PAN a Brasil no concuerdan con las fechas de las actas de inspección y entrega, ni con la salida de los productos alimenticios en el puerto de la ciudad de Río Grande.

Otro aspecto a resaltar en la auditoría es que la empresa contratista vinculada no tenía capacidad económica, así quedó demostrado cuando se recibió copia del estado de cuenta bancaria, cuyo saldo al 31 de diciembre de 2009 era de 35.00 dólares.

De acuerdo con el examen llevado a cabo por la Dirección de Investigaciones y Auditorías Forenses (DIAF), de la Contraloría, la contratista pagó a la empresa brasileña Prativita Alimentos Nutricionais, cuando el Banco Nacional de Panamá le efectuó los desembolsos correspondientes al Contrato.

Por ello fue el FIS quien realmente pagó los alimentos al fabricante y la empresa sólo entregó el dinero, constituyéndose en un intermediario entre el Estado, representado por el FIS, y la empresa brasileña, obteniendo cuantiosos beneficios a costa del erario.

“Todo lo anterior demuestra que no había necesidad de sustituir el Programa de Granos, que brindaba el almuerzo a los estudiantes; ya que una vez que el proyecto de comida deshidratada fue suspendido abruptamente el 9 de noviembre de 2011, se retornó el Programa de Granos que previamente había sido reemplazado por los productos deshidratados”, sostiene el informe.