Así se vivió el emotivo funeral del papa Francisco. El evento reunió a mas de 200.000 personas en la Plaza San Pedro, con la presencia de 130 delegaciones...
- 13/07/2011 02:00
La historia evolutiva de la humanidad es tremendamente impresionante. El progreso del conocimiento y la tecnología, aunado a los esfuerzos de grandes personalidades, han permitido mejorar cada uno de los aspectos que envuelven al ser humano. Tal es el caso de Ernst Wertheim, ginecólogo alemán que ha principios del siglo XIX considero que con un gran esfuerzo quirúrgico se podía curar el cáncer de cérvix . No solo fueron los aportes de Wertheim, en la cirugía abdominal contra el cáncer, también se sumaron otros galenos que perseguían el mismo objetivo, como Joe Vincent Meiggs, quien aportó a la técnica de Wertheim y logra mejorar los resultados de sobrevida y disminuir las complicaciones. Tanto los seguidores de Wertheim como sus adversarios continuaron con sus aportes en la lucha contra el cáncer.
Desde 1912 cuando este alemán publica sus trabajos, sabemos que con una cirugía podemos curar el cáncer de cérvix. Fue tan impactante su técnica, que cien años después continúa siendo la cirugía estándar.
Hoy día no sólo existe para enfrentar el cáncer de cérvix la cirugía de Wertheim – Meiggs, también contamos con otras técnicas y abordajes quirúrgicos que nos permiten obtener los mismos y mejores resultados.
Un ejemplo de esto es la Cirugía de Schauta, que no es del todo nueva, pero con sus mejoras se han logrado maravillosos resultados. Esta cirugía, por ejemplo, nos permite curar a una paciente con cáncer de cérvix sin dejar un solo rastro ni cicatriz en el abdomen. Frente a este problema —el cáncer de cérvix— existen múltiples alternativas para enfrentarlo, en este caso solo estamos considerando las opciones quirúrgicas.
Dependiendo de la etapa en que se encuentre la enfermedad, asimismo serán las posibilidades de cirugía; cuanto más avanzado, menos posibilidad de cirugía y menor probabilidad de cura.
El éxito de todo manejo médico y el secreto para conservar la salud está en predecir y anticipar los eventos. Las herramientas para reparar son muchas, y cada paciente es un escenario diferente.
En nuestra realidad panameña, cada vez encontramos más pacientes jóvenes con esta enfermedad, lamentablemente muchas acuden tardíamente, cuando la enfermedad ya ha tomado el control de sus vidas y por ende las posibilidades de cura son bajas.
Siempre existe la encrucijada médica de buscar la mejor alternativa de tratamiento para cada caso: para algunas será la cirugía (con las diferentes técnicas, según la etapa de la enfermedad) y para otras será la radioterapia. Ambos tratamientos arrojan buenos resultados, siempre y cuando se encuentre el problema a tiempo y se sigan fielmente las recomendaciones.
Nunca falta el miedo y la incertidumbre de los resultados, probablemente Wertheim también lo vivió, pero creyó en que podría obtener buenos resultados. Ayúdanos a cambiar la historia de esta enfermedad, acude periódicamente al médico, realízate con frecuencia el Pap, sigue las recomendaciones.