El creador de contenidos y escritor conversa con este medio sobre la lengua y la incorporación de nuevas palabras al español. Habla un poco de su vida,...
- 17/04/2020 00:00
El presidente del Sindicato de Industriales de Panamá (SIP), Aldo Mangravita, lanza un llamado urgente al Gobierno para reabrir, al menos, ciertas empresas que puedan echar a andar la tuerca económica, detenida hace más de un mes a causa del Covid-19. Es un debate entre el balance de la salud y que se pierdan menos empleos, o cierren menos empresas que no tienen la suficiente liquidez para esperar a que pase la crisis. Se pregunta con cuánto dinero cuenta el Ejecutivo para alimentar a la población más vulnerable, a los cesantes, subsidiar a los independientes y atender las múltiples necesidades que arrastrará el virus Covid-19.

Mangravita considera que urge implementar un protocolo sanitario en el resto de las empresas, tal y como lo hacen ahora farmacias y supermercados, de lo contrario prevé una situación severa en términos económicos que en todo el mundo resulta ser la otra cara de la moneda de la pandemia. Se queja de la ley seca, una medida tomada a la ligera, dice, que dejó sin trabajo a miles de personas del ramo y que debería levantarse lo antes posible para evitar ahondar la crisis.
Son varias empresas, cientos de ellas que están ahora mismo en una situación de incertidumbre muy grande. Las que se dedican al sector alimenticio están básicamente todas abiertas y trabajan con los recursos que tienen. Otra parte de las empresas se dedica a la manufactura que reiteramos que ya se debe implementar el protocolo de reapertura económica. Han pasado más de 36 días desde que empezó la pandemia (en Panamá) y es necesario que retomemos el rumbo económico del país. Esto es esencial para que la rueda económica del país funcione. Hemos tenido conversaciones con el Gobierno y lo que queremos es arrancar las empresas, observando y manteniendo los protocolos de higiene que dicta el Ministerio de Salud, pero las dos van de la mano.
Más del 60% de las empresas que pertenecen al SIP se dedican a los alimentos, pero el resto son manufacturas importantes para la economía. Este sector da empleo a más de 150 mil trabajadores y no queremos que se dilate más la reapertura económica, y se debe dar a la mayor brevedad posible.
De la misma manera en que se está dando en otros países. Cada uno con aperturas graduales. El de las bebidas, de licores y cervecerías hay miles que no están trabajando, y esta ley seca que se impuso es absurda y antieconómica. Está dejando miles de empleos y cientos de locales sin poder abrir las puertas. Esto afecta muchísimo. Si ya tenemos una cuarentena y toque de queda, no vemos porqué enlistar el consumo de licor en una ley seca. Nos parece que esta medida fue tomada a la ligera y está dejando al Gobierno sin ingresos millonarios que necesita ahora, y con un bolsón de desempleo peor del que se puede manejar.

Las medidas que impiden muchas veces que funcionen bien son los salvoconductos. Estos salvoconductos son un enredo para transportar los productos; hay que estar bien claros porque nos preocupa mucho el anuncio que dio en estos días la ministra de Salud (Rosario Turner), en conferencia de prensa. en el que alteraba el mecanismo para obtener los salvoconductos. Es importante que se sepa que alimentar a la población, en estos momentos, se hace con el esfuerzo de los trabajadores, que al igual que los doctores, enfermeras y bomberos están en la línea de fuego de la pandemia, y son tan importantes como los que mencioné.
Recientemente escuchamos del ministro [sic] de Trabajo que había 35 mil solicitudes de suspensión de contratos en esa entidad. Esto es muy preocupante, por eso reiteramos que entre más rápido hagamos esta reapertura económica, servirá para la industria y el Gobierno. Se tiene que decidir rápidamente. No hay un cálculo hasta el momento de cuántos quedarán sin empleo en nuestro gremio. Las empresas que están metidas en el decreto y cerraron, son unas, pero las que pueden abrir con excepción, son otras. Pero si ya hay más de 35 mil contratos suspendidos, no es difícil predecir que son miles y miles de personas desempleadas que ya se suman a un desempleo que venía del año pasado.
El Gobierno ha dicho que cuenta con $1,300 millones para esto. No sabemos cómo se va a repartir y a qué empresas o empleos se va a dar. Algunas empresas no pueden pagar las quincenas porque no han tenido ingresos en estos días, esto es importante que lo sepa el Gobierno, el Ministerio de Comercio y el ministro encargado de las inversiones. Aquí lo preocupante es que no hay comunicación entre el ministro de Comercio, la ministra de Salud y el ministro de Seguridad ,que es lo que está ahora mismo entorpeciendo la reapertura.
El presidente Laurentino Cortizo anunció sobre el paquete económico que está pronto a implementarse, ¿cómo se debe distribuir la ayuda tomando en cuenta que los gastos son más grandes que el presupuesto?
No sabemos, formamos parte de una mesa de trabajo que elaboró un documento con el ministro de Comercio. Es un documento amplio de 16 páginas que tiene los protocolos de apertura que van con el aporte económico para esa apertura. Es importante que esta semana se defina el protocolo de apertura y el dedo que se va a utilizar para tirar un salvavidas a las empresas que a su vez tienen a sus colaboradores en un limbo.
En su gran mayoría de los problemas de salud y de higiene. Cómo se deben implementar en las empresas, como ya lo estamos haciendo algunas. Toca el tema económico, pero no lo define, entonces es importante definir el tema económico, por ejemplo las pequeñas y medianas empresas, cómo van a acceder al dinero, el que trabaja día a día, el independiente, y esa reapertura es importante; los salones de belleza, ferreterías, tiendas donde se puede aplicar el mismo protocolo que se usa para entrar al supermercado o las farmacias, se puede ir adaptando a las necesidades de industrias o comercios que ahora están cerrados. Se usan guantes y mascarillas, y distancia entre personas.

En la mesa económica se dice mucho, se plantean las necesidades del sector. El Gobierno apunta, hace agendas. Las cajetas o bolsas de alimentos, los bonos que se reparten y la cédula que funciona como tarjeta de débito son un paliativo temporal, tenemos que agilizar que las empresas puedan llamar a sus trabajadores nuevamente a trabajar y que se use esto para desarrollar la economía.
Fecha no sabemos, estamos a merced del Minsa y del Minseg, con los cuales no tenemos conexión directa; nuestra comunicación llega solo al Ministerio de Comercio.
Yo espero un rumbo claro y definido. Le hemos dado los puntos que necesitamos resolver para que arranque y lo que queremos es que se tome la decisión en firme y se dé a nivel capitalino, donde está el mayor consumo, y luego se implemente en otras provincias.
Bueno, es que tenemos que saber, cómo y con qué fondos el Estado va a salir adelante con una cuarentena total como se está llevando ahora. O sea, qué fondos va a llevar adelante esto, los bonos, las bolsas y las cédulas, ¿alcanzan para todo el mundo? Como no tenemos claro esto, le estamos pidiendo que hagamos este esfuerzo adicional, todos con sus mascarillas, guantes, y las empresas que abran con su equipo de desinfección, que puedan seguir adelante.
Si seguimos haciendo 400 o 500 pruebas al día, ¿cuánto vamos a requerir para hacer 4 millones de pruebas? Eso es lo que nos preocupa. Si ya se identificaron las personas con síntomas, que no deben estar en la calle, y si hay personas con riesgo, entonces ellos no deben salir, pero debemos definir hacia dónde queremos llegar.
Las conversaciones siempre son con el ministro de Comercio e Industrias, es nuestro interlocutor, pero no hemos pasado más allá de conversar con alguien más. También hemos conversado con la ministra de Trabajo sobre lo anterior.
Lo que hemos venido conversando, que al utilizar los fondos se haga para minimizar el desempleo. A nosotros nos preocupa mucho que el Gobierno demora para pagar, no es un buen cliente porque demora los pagos. Esto nos tiene preocupados porque si las industrias y las empresas le están vendiendo en el momento para hacer las bolsas, los cupones y otros implementos de salud, ¿cuánto demorará el Gobierno en pagar a estas empresas?
Sí, es el sector que está abasteciendo la canasta alimenticia, que es primordial. Es el sector que, al igual que los médicos y enfermeras, está en la línea de batalla para entregar los productos en los puntos de venta y distribuir a los consumidores. A los productores de pollo y de cerdo sí se les está pagando a tiempo, eso es lo que queremos para que no se atrase la cadena económica. Un ejemplo del mal pago del Gobierno son los pollos que se dieron para las naviferias, eso no lo ha pagado, y nos preocupa.
El Gobierno está atrasado hace meses, antes de que empezara la crisis de Covid-19, entonces se han pospuesto millones y millones que se han atrasado y todos quieren que les paguen. No quieren discursos, sino que se pague para que el dinero entre a la economía y circule en la industria y se dé el movimiento de dinero.
No tengo una bola de cristal, pero definitivamente que el rumbo económico del país y del mundo va a cambiar. Esta pandemia ha obligado a los países a hacer una reingeniería de cómo van a sobrevivir y lo que vemos hacia adelante es una recesión, un estancamiento que tenemos que enfrentar con iniciativas privadas y públicas. Todos debemos trabajar juntos para salir adelante... Nosotros hemos sido solidarios y el Gobierno lo sabe, ellos también tienen que ser solidarios con nosotros en el sector. Debemos ir juntos, porque si uno va por un lado y el otro por uno distinto, y no nos comunicamos, va a ser más pesado.