La Policía Nacional aprehendió al alcalde electo de Pocrí por presunto peculado, tras una investigación relacionada con proyectos no ejecutados del Conades...
- 04/05/2011 02:00
PANAMÁ. La Policía Nacional encontró una forma diferente de controlar las manifestaciones de quienes intentan obstaculizar las vías públicas. Ayer, un grupo de afectados por el jarabe envenenado con dietilenglicol y miembros del Comité por el Derecho a la Salud y la Vida lo estrenaron.
Mujeres y hombres enfermos por el medicamento se enfrentaron a empujones con unidades femeninas de la Policía que trataban de controlar la desesperación de los personas que buscan una respuesta de las autoridades a través del cierre de la vía Transístmica.
Las enviadas no utilizaron toletes ni armas —como es costumbre—. Simplemente se unieron en cadena para garantizar el libre tránsito por la importante vía.
Desde muy temprano, los afectados por el jarabe acudieron a las inmediaciones de la especializada de la Caja de Seguro Social (CSS) para exigir que las autoridades de Salud cumplan con el acuerdo del pasado 3 de abril en el que se garantizaba que se les daría atención más expedita, medicinas e insumos médicos en el Centro Especializado de Toxicología.
Otra de las peticiones es que el director de la CSS, Guillermo Saez Llorens, ordene el reintegro inmediato del dirigente del gremio Gabriel Pascual.
La manifestación, que se mantuvo hasta pasadas las 10 de la mañana, estuvo custodiada por las unidades policiales. En las aceras de la vía permanecían los afectados con pancartas y gritando consignas.
En la sede de la CSS, Marlon De Sousa, subdirector de la entidad, le pidió a Pascual que no utilice a los pacientes para sus aspiraciones políticas. ‘Él no es afectado. Tú me dices que no hay medicamento, dame el nombre, y te lo conseguimos donde haya’, le respondió De Sousa a Pascual. El funcionario informó que están por conocer la cantidad exacta de personas afectadas para poder dar respuesta.