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- 14/03/2015 01:00
Con influencias del subgénero de estafadores, conocido como ‘Con Men’, Focus combina acción, romance y audacia criminal. La historia comienza cuando el criminal de guantes blancos Nicky Spurgeon (Will Smith) conoce durante una salida nocturna a Jess (Margot Robbie), una mujer que intenta seducirlo y timarlo en la habitación de un hotel en forma fallida.
Ella quiere ser una criminal, pero le falta escuela y también calle. Lo que ella no sabe –y esto es posible que explique el título de la película- es hacerle perder el foco a sus víctimas para poder engañarlas con facilidad. Por eso, y después de un poco de insistencia de parte de ella, Nicky decide formarla en el oficio y tomarla como ‘pasante’ en su pequeña empresa criminal.
Esta no será, sin embargo, una típica historia de maestro y alumna, ya que al terminar su primer trabajo, Nicky se despedirá de ella para seguir con su vida. Jess necesitará sólo un instante para aprender las dos lecciones básicas y fundamentales de su oficio: nunca le creas a otro estafador y nunca te enamores de él.
VERDAD O MENTIRA
No es casual que las películas de estafadores suelan tener éxito en las taquillas. Sea en la vida o en un filme, hay pocas cosas más atrapantes que la intriga y el no saber qué es lo falso o lo real, quién está mintiendo o quién dice la verdad.
Eso es algo que Orson Welles ya sabía cuando lanzó su extraordinario filme Con F de falso (1973), en el que se dedica a narrar una historia en un mundo entre lo verdadero y lo falso. Y eso es lo que sucede con Focus .
Es la posibilidad de que todo se transforme en mentira de un minuto a otro o de que alguno de los personajes confiese algo que los otros no sabían –ni los espectadores tampoco-. Eso es lo que marca el rumbo en este subgénero del cine.
Esta situación, además, se acentúa en la segunda parte de la película, cuando tres años después de los eventos del comienzo, Nick llega a la lejana ciudad de Buenos Aires y descubre que la persona que lo contrató, el dueño de una escudería de Fórmula 1 interpretado por el brasilero Rodrigo Santoro, mantiene una relación con Jess.
Aparentemente, Garriga no sabe que ellos ya se conocían, ni Jess o Nick que se encontrarían en la lejana Argentina después de tanto tiempo; y deducir quién es quién es lo que nos hace mantener nuestra atención en la pantalla. Todos saben mentir. Todos pueden ser asesinados, manipulados o usados. Todos pueden ser estafados.
El ingenio y la audacia de los personajes será la que cree los giros del guión en esta segunda parte. Aún más que en la primera. Y así, los directores Glenn Ficarra y John Requa, que comparten toda su filmografía desde Love You Phillip Morris (2009), vuelven con su ritmo acelerado y para todo público.
Quizás a algunos les resulte un relato demasiado obvio, pero lo cierto es que encontrarán escenas muy bien logradas, y aunque se trate de una película de estafadores que amenaza con convertirse en una comedia romántica en forma constante, mantiene la intriga y logra sorprender hasta el final.
UNA BUENOS AIRES DE PELÍCULA
Pocas veces Hollywood mostró a Buenos Aires como lo hace Focus . El mercado de San Telmo, el Caminito de La Boca, Puerto Madero, el Obelisco y hasta el Autódromo de La Plata. El setenta por ciento de las locaciones en las que transcurre la película son escenarios claves de esta ciudad.
Pero, además, Buenos Aires es mostrada de una manera singular: sin embellecerla ni afearla en exceso. Por eso, muchos bromearon en Argentina con que ni el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires unido con el nacional podrían haber imaginado una mejor publicidad para atraer al turismo.
A diferencia de otras producciones de Hollywood que se filman fuera de Estados Unidos, Focus también introduce a un gran número de actores locales para cubrir personajes secundarios.
Entre ellos, merece una mención especial Juan Minujín, quien interpreta al barman de la fiesta de Garrida.
No es un dato menor que este trabajo le llegó a Minujín luego de Vaquero (2011), su opera prima como director en la que él mismo interpreta a un actor argentino llamado Julián Lamar que busca triunfar en el cine estadounidense.