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- 22/09/2023 00:00

La enfermedad celíaca es un trastorno autoinmune que puede causar diversos síntomas, desde problemas digestivos hasta fatiga, problemas de piel y deficiencias nutricionales.
Estos síntomas se desencadenan por la ingestión de gluten, un tipo de proteína que se encuentra en el trigo, la cebada y el centeno. Esto desencadena una respuesta inmunitaria que provoca inflamación y daños en el intestino delgado.
La nutricionista Vanessa Leone conversa con La Estrella de Panamá sobre esta enfermedad. Explica cómo se puede diagnosticar y la manera de tratarla.
Es una enfermedad autoinmune, las personas nacen con ella, está en los genes. Para manejarla debemos eliminar el consumo de un nutriente llamado gluten, que es la parte proteica presente en algunos cereales como el trigo, el centeno y la cebada. No es lo mismo ser una persona con enfermedad celíaca, que tener sensibilidad e intolerancia al gluten.
La enfermedad viene en los genes y se puede expresar desde que uno nace o a lo largo de la vida; es decir, que por algún motivo el gen no ha expresado la enfermedad y uno no sabe que está predispuesto a padecerla. Es importante que si las personas sospechan que padecen la enfermedad porque presenta síntomas, acudan a un profesional de salud, un gastroenterólogo, para que determine si en efecto padece la enfermedad o tiene otra condición.
Si uno consume alimentos que contienen gluten va a empezar a manifestar, por ejemplo, diarrea, vómitos, hinchazón, dermatitis. Por eso uno debe estar consciente de evaluar qué alimentos le producen síntomas.
El especialista hace un examen clínico completo. Se lleva a cabo un análisis sanguíneo y en aquellos casos en que el especialista decida que debe ir un poco más allá, se puede hacer una biopsia intestinal para determinar si la persona tiene o no la enfermedad celíaca.
El gen se puede manifestar en cualquier momento de la vida. Hay que destacar que una vez que la persona ha sido diagnosticada, el manejo nutricional de su dieta sin gluten va a ser para toda la vida. Eso si es importante tenerlo en cuenta, por lo que la educación es muy importante. Se debe manejar con su médico, con un nutricionista idóneo el plan de alimentación que va a preparar para que sepa que puede comer y que no.
Evitar el trigo, la cebada, el centeno que son los principales cereales con presencia de gluten. No solamente van a ser ellos tipo granel, sino aquellos productos procesados que han sido elaborados con estos tres cereales.
También puede darse por contaminación cruzada. Si algún producto, al prepararse, pasa por una línea en la que ha pasado alguno de estos cereales, puede contaminar. Se deben leer los ingredientes, existe en Codex las normas de etiquetado general para productos envasados, piden que aquellos ingredientes que puedan causar hipersensibilidad sean resaltados y señalados en el listado.
Igualmente la persona puede identificar si un producto es libre de gluten a través de un sello que otorga la Asociación de Sociedades Europeas de Celiaquía, que se caracteriza por una espiga de trigo cruzada. Si ve que algún producto tiene este sello, puede sentirse en la libertad de consumirlo porque ha pasado por una rigurosa auditoría, no solo de los ingredientes y la materia prima, sino también el procesado del alimento.
Un diagnóstico oportuno es importante para evitar que se produzcan alteraciones relacionadas con la enfermedad. Si la persona empieza a ver que hay cambios cada vez que come alimentos con gluten, debe acudir al médico para que le haga un diagnóstico certero y temprano, porque si no podrían ocurrir otras alteraciones.
En efecto, son dos cosas diferentes. Una cosa es la enfermedad celíaca, que viene en los genes y es autoinmune versus tener una sensibilidad o intolerancia al gluten. Si se tiene intolerancia y se deja de comer alimentos con esta parte proteica, se vuelve a la normalidad. Mientras que el otro tiene un manejo más específico y debe ser llevado y controlado con monitoreo.
Forman parte de cualquier cereal y en la dieta tradicional de cualquier persona se pueden ingerir libremente. La única excepción es cuando ya se ha dado un diagnóstico de que la persona tiene enfermedad celíaca o una sensibilidad, solo en estos casos es que debemos evitar el consumo de gluten. Hay que comer todos los alimentos de una manera balanceada para poder tener todos los nutrientes que necesitamos y de esta manera vivir sanamente.
Una vez que identificamos y educamos al paciente de cuáles son los alimentos con gluten, se le da un plan de alimentación balanceado e individualizado, tomando en consideración muchos otros aspectos de la persona. Este plan es de por vida.
En el país está la Fundación de Celíacos, quienes mencionan que uno de cada 100 panameños puede ser que padezca de la enfermedad. Es importante educarnos para saber si la tenemos o no.