Beneficios de la terapia con células madre, y sus detractores

Actualizado
  • 11/03/2020 00:00
Creado
  • 11/03/2020 00:00
A la Asamblea Nacional llegó el proyecto de ley No.179 que establece las guías para el cultivo, desarrollo, reproducción y aplicación de células madre mesenquimales y sus derivados en la república de Panamá

No son milagrosas, pero sí es un paso más en el mundo de la medicina regenerativa. Las terapias con células madre “posiblemente podrían usarse para tratar muchas enfermedades y trastornos médicos”, asevera la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés). Y es que las células madre tienen el potencial de reparar, restaurar, reemplazar y regenerar las células de un organismo, lo que da esperanzas para tratar enfermedades o trastornos para los cuales hay pocas opciones de tratamiento. Frente a este panorama, ¿podrían las terapias con células madre tener detractores?

Beneficios de la terapia con células madre, y sus detractores

La FDA publica en su página web oficial su preocupación en cuanto a que algunos pacientes que están en busca de cura y remedio caigan presa de tratamientos con células madre ilícitos y potencialmente perjudiciales.

Pese a ello, es un hecho que en las últimas décadas se han dado no pocos avances científicos en la aplicación de estas terapias, pero también son una realidad las controversias y debates que han surgido en torno al tema.

Panorama nacional y regional

A la Asamblea Nacional llegó el proyecto de ley No.179 “que establece las guías para el cultivo, desarrollo, reproducción y aplicación de células madre mesenquimales y sus derivados en la república de Panamá”. La propuesta legislativa fue presentada en enero pasado por el diputado del Partido Revolucionario Democrático (PRD), Crispiano Adames.

“El objetivo de la ley es ofrecer a toda persona que requiera de aplicación de tratamientos experimentales seguros y de eficacia terapéutica comprobada sobre células mesenquimales, una oportunidad de recibir dicho tratamiento, y establece las guías para la utilización en la república de Panamá, con el fin de regular y garantizar el apropiado funcionamiento de los centros de recolección, aislamiento, expansión, almacenamiento y aplicación de células mesenquimales y sus derivados”, expone el proyecto de ley.

Beneficios de la terapia con células madre, y sus detractores

Aunque recientemente se busca esclarecer el aspecto legal, hace más de una década en Panamá opera Stem Cell Institute, cuya “misión es estar a la vanguardia de la investigación de nuevos protocolos de tratamiento para enfermedades crónicas utilizando células madre adultas, siempre de acuerdo con los más altos estándares internacionales de bioética”.

“Nuestra medicina se basa en el uso clínico de células madre. Desde que abrimos nuestras puertas en 2006, hemos realizado más de 10,000 procedimientos. Interactuamos habitualmente con colegas en Estados Unidos y de otros países que usan células madre como parte de ensayos clínicos para incorporar los avances más recientes en la atención al paciente”, recoge Stem Cell Institute, en su sitio web.

El instituto brinda tratamientos para autismo, parálisis cerebral, insuficiencia cardíaca, esclerosis múltiple, osteoartritis, artritis reumatoide, enfermedades autoinmunes y lesiones de la médula espinal.

El país también cuenta con Medistem Panamá, laboratorio de células madre adultas ubicado en la Ciudad del Saber. Dentro de sus tres salas blancas y bajo una de las ocho campanas de flujo laminar se observa cómo se recolectan, producen y prueban las células madre mesenquimales derivadas de tejido umbilical humano (huMSC).

Estos factores, entre otros, han colocado a Panamá a la cabeza del continente en lo que a investigación sobre células madre y sus aplicaciones terapéuticas se refiere.

“Panamá viene haciéndolo –investigaciones y aplicaciones terapéuticas con células madre– desde hace casi 14 años. Una de las empresas que más ha aportado en el mundo en el tema está aquí en Panamá”, sostiene Nicolás Peña, biólogo investigador, quien asegura que en la región Costa Rica, México y Bahamas también aplican estas terapias, mientras que Colombia recién empieza a abordar el tema.

¿Qué son?

“Las células madre son una población muy grande de células. Son madres porque tienen la capacidad de tener descendencia de manera vertical u horizontal. Hay una población muy específica que la ley está contemplando permitir, entonces, de todo el grupo de células madre que hay, las que trabajamos se llaman células madres mesenquimales o células mesenquimales porque vienen de un tejido mesenquimal en la placenta, exactamente en el cordón umbilical”, detalla Peña.

El proyecto de ley No.179 ratifica la afirmación del biólogo. “Las células madre se dividen en dos grandes grupos, el primero conocido como células madre embrionarias, cuyo uso no está autorizado en Panamá y que se encuentra expresamente prohibido en la Ley 3 del 15 de enero de 2004, disposición que prohíbe toda forma de clonación humana y dicta otras disposiciones. El segundo grupo se conoce como células madre adultas, que se definen como la materia prima del cuerpo, a partir de las cuales se generan todas las demás células con funciones especializadas”, es el caso de las mesenquimales.

Estas se refieren a una población de células multipotentes que se pueden aislar de diferentes tejidos adultos. La temática está regulada en la república de Panamá dentro de la ley de trasplantes de órganos, lo que busca cambiar el proyecto de ley No.179.

“Por su impacto económico, científico y social”, el tratamiento de las células mesenquimales “merece contar con una regulación independiente y que sobre todo coloque a Panamá en el escenario mundial que le corresponde”, recoge el proyecto de ley.

Beneficios de la terapia con células madre, y sus detractores

Luis Jiménez-Arias, profesional de la bioética y quien fue miembro de la junta asesora de directores del Instituto de Medicina Celular en Costa Rica, asegura que la ventaja de las terapias con células madre mensequimales es que no utilizan embriones, sino tejido adulto de un niño que ya nació y que se va a botar en la placenta y el cordón umbilical. “Tomamos la sangre del cordón umbilical que se va a tirar, para extraer las células”, dice.

El académico explica que el empleo de células madre no es algo nuevo. “Se conoce desde hace mucho tiempo y la medicina ha evolucionado mediante la investigación científica en el tema. No estamos en una etapa oscura de la investigación o de la experimentación científica. No, ya hay en el mercado cientos de miles de pacientes que han sido tratados en el mundo”, apunta.

En sus inicios, los científicos encontraron maneras de utilizar células madre de médula ósea y a raíz de este descubrimiento, el primer trasplante de célula madre fue realizado en 1956 a través de la médula ósea entre gemelos idénticos. El resultado fue la remisión completa de la leucemia de un gemelo.

En mayo de 2004 abrió en Inglaterra el primer banco de células madre del mundo. Le siguieron muchos países y antes de que terminara el año 2005, había en el mundo más de 100 bancos.

Controversia ética

A criterio del bioeticista Jiménez-Arias, quien también se ha desempeñado en Costa Rica como profesor de bioética en la Universidad Juan Pablo II, la medicina regenerativa es el futuro de la medicina, sin embargo ha enfrentado temas éticos “porque en el principio se creía que mientras más joven era el tejido mejor trabajaba. Entonces empezaron a trabajar con embriones humanos, a crear embriones para destruirlos o a usar embriones resultantes de la fecundación in vitro, eso era como crear una vida humana para luego destruirla, eso no tiene lógica y está mal”, a raíz de ello empieza el rechazo a esta práctica.

Beneficios de la terapia con células madre, y sus detractores

Por esto, especialistas están interesados en que se especifiquen los términos. “Cuando se dice células madre, la gente piensa en bebé, en embrión, y no tiene nada que ver con eso; lo correcto es decir células madre mensequimales o células mensequimales”, indica el biólogo investigador Peña.

Mientras que Jiménez-Arias enfatiza que en cada nuevo desarrollo biotecnológico nos vamos a enfrentar a problemas de tipo legal por la legislación y a temas ético-filosóficos. “Por ejemplo, cuando aparecieron las plantas transgénicas les llamaban fenómenos que nos iban a matar, hubo movimiento de mucha gente para promover que no se comiera nada similar. Hoy sabemos que esos productos ofrecen un montón de ventajas”.

“He estudiado en Roma, en una universidad Pontificia pendiente de la Santa Sede, y esta ha promovido desde 2016 el uso de células madre mesenquimales. Ha financiado algunos proyectos para que se continúe con la investigación y se ha demostrado que todo se puede hacer éticamente sin embriones, sin matar vidas, con células que ya están en nuestro organismo”, asegura el profesor de bioética.

Pese a los avances y los posibles beneficios del tratamiento, los especialistas coinciden en que “esto no es una pócima mágica. Es darle a tu cuerpo la capacidad de tener unas células que se van agotando durante la vida”.

¿Qué son las células madre?

Lo Nuevo
comments powered by Disqus