Kami Burui, un vínculo entre la naturaleza y el pueblo guna

Actualizado
  • 09/09/2019 02:00
Creado
  • 09/09/2019 02:00
Luis Castillo, ejecutante y profesor de la flauta guna, hace los esfuerzos necesarios para conservar y trasmitir, a las nuevas generaciones, el valor cultural del toque de este instrumento musical

‘Mi abuelo tocaba el kami burui, mi papá también. Me enseñó a tocarlo cuando tenía siete años. Ahora es mi turno de instruir a los niños', apunta Luis Castillo, ejecutante y profesor de este instrumento.

Durante las clases, Castillo enfatiza el valor cultural del toque del kami Burui, ‘esta es nuestra tradición y no debe desaparecer', dice.

Cuenta la historia que todo empezó cuando Dad Ibe (antiguo líder guna) invitó a grandes conocedores de danza y música para celebrarle Inna-Suit (fiesta del corte de cabello) a su hermana Olowaili. Mujeres vestidas de rojo y blanco salieron a bailar. ‘Se movían con mucha cadencia y retrocedían dando cuatro giros entre sí y gritaban: ‘gweya, gweya, manigili, manigili'. Luego imitaron los movimientos de los canarios y gritaban: ‘ubbi, subbi', golpeando sus pechos', recoge Atilio Martínez, en su libro Origen de la danza guna .

Guiados por los conocedores de las danzas, a estos movimientos se le adicionaron instrumentos musicales. Allí surgen la nasisi (maraca), utilizada por las mujeres gunas para dormir a sus bebés y para las diferentes danzas y el kami burui (flauta), usado por los hombres para acompañar a las damas en las danzas.

El pueblo guna hoy hace los esfuerzos necesarios para conservar y trasmitir la importancia de estos instrumentos a las nuevas generaciones.

‘Cualquier persona no lo fabrica ni lo busca. Solo los que saben utilizarlo pueden retirarlos de donde los fabrican, es muy peligroso que quien no lo toca lo busque, así nos enseñaron nuestros antepasados',

LUIS CASTILLO

INSTRUCTOR DEL KAMI BURUI

Para Castillo, el valor del kami burui va más allá de ser un instrumento musical. ‘Es un legado cultural que se transfiere de generación a generación'.

Desde un punto de vista acústico, los instrumentos musicales son objetos que producen ondas sonoras para la realización de música. Aunque acertada la afirmación, para los gunas esta definición resulta pobre para expresar el significado del kami burui en sus raíces culturales.

Según la tradición, el instrumento da paso a movimientos que evocaban los vuelos de las aves y de otros animales, del viento, del mar y de los ríos, creando un vínculo entre la madre naturaleza y el pueblo guna.

‘La flauta y las maracas ponen el ritmo para cada una de nuestras danzas en las que representamos algún aspecto de nuestra Madre Tierra', detalla Castillo.

Fabricación

El kami Burui es elaborado por manos indígenas. ‘Lo fabrican en mi pueblo Piria, en Aguaclara y en Nura, de un bambú enano, no sabemos su nombre', indica Castillo, y añade que esta planta crece en una zona a cinco horas de la comunidad de Pintupo (comarca Guna Yala). ‘Hay que llegar con canalete, porque no se puede usar motor, el río tiene piedras grandes'. ‘Hay bastante de estos árboles, nosotros sembramos unos 50 o 60, Dios los riega y se multiplican', dice.

Actualmente, en toda la comarca hay cuatro ancianos que confeccionan el kami burui. ‘Cualquier persona no lo fabrica ni lo busca. Solo los que saben utilizarlo pueden retirarlos de donde los fabrican, es muy peligroso que quien no lo toca lo busque, así nos enseñaron nuestros antepasados', indica Castillo.

Cada pueblo tiene su maestro y, si el estudiante es disciplinado, en cuatro días puede dominar el toque del instrumento cuyo tamaño depende de la edad de quien lo interpreta. Hay más de doce clases de flautas. ‘Los niños sí están interesados en aprender, aunque les falta disciplina. El kami burui no desaparecerá, es nuestra tradición', puntualiza Castillo.

Costumbres ancestrales en Guna Yala

FESTIVIDAD

El pueblo guna realizan diversas concentraciones culturales o festividades, entre ellas la fiesta de la aguja, que consiste en la perforación de tabique nasal, sobre todo de las niñas. Esta fiesta se realiza solo en el seno familiar. Según la costumbre, en un principio se le practica una pequeña cirugía a la pequeña y se le coloca un hilo. Una vez que la niña va creciendo, se le cambia por una argolla. La fiesta del corte de cabello, mejor conocida como Inna-Suit, en este caso el Kantule donde se realiza el canto tradicional ‘dislaigala', que significa canción de las tijeras. También se celebra la fiesta de Inna Muustiki, que marca el inicio de la pubertad y se celebra a propósito de la primera menstruación de la pequeña. También existe una ceremonia dedicada para la pubertad masculina. Esta va acompañada de bebidas alcohólicas, con la única excepción de que las mujeres no participan. Los varones más ancianos realizan un ritual en el mar.

Otra celebración es la de estilo nupcial, que se efectúa cuando el hombre va en busca de su futura esposa. El varón es acompañado por un grupo de jóvenes quienes van recitando canciones alusivas al matrimonio. Dicho ritual se realiza en un lapso de 4 a 5 días. En ese tiempo, el futuro esposo es probado por el suegro para determinar si tiene la capacidad para enfrentar un matrimonio. Algunas de estas costumbres se han perdido o modificado; sin embargo, los ancianos gunas buscan salvar lo que queda de sus tradiciones, enseñándolas a los más jóvenes.

Lo Nuevo
comments powered by Disqus