¿Cómo captar clientes de 24 kilates?

Si deseas trascender tu negocio y captar clientes 24 kilates, es decir, aquellos que representan tu 80% de ganancias, con base en el principio de Pareto –también conocido como la regla del 80-20 que describe el fenómeno estadístico–, aquí comparto algunas recomendaciones sobre escenarios para lograrlo.

Licitaciones públicas: una licitación pública es un proceso de contratación mediante el cual el Estado se compromete a celebrar un contrato para la adquisición de un bien o servicio.

Objetivo: no te enfoques solo en tus clientes del día a día, busca reglamentar tu empresa, los permisos correspondientes y evalúa licitar en los portales autorizados del gobierno para indagar en tu sector de producto/servicio y ofrecer tu talento al Estado.

Convenios con cámaras de comercio: un acuerdo comercial es un convenio entre una cámara de comercio y tu empresa, con el fin de brindar beneficios a la cámara y a sus agremiados.

Objetivo: cerca de tu oficina, en tu ciudad, siempre hay una cámara de comercio o sectorial que representa tu renglón de producto/servicio. Una buena idea para el acercamiento es ofrecer un convenio entre tu empresa y la cámara, donde brindes productos especiales a los agremiados con descuentos especiales y un plus que solo encontrarán los que estén afiliados a esta cámara.

La cortesía: la cortesía es prestar un servicio o dar un producto gratuito a tu cliente. Esto se traduce en un encuentro agradable y que produzca buenas relaciones entre tus futuros clientes y tu empresa.

Objetivo: este elemento es un disparador de ventas poderoso. Recuerda que debemos vender, sin vender. Vendemos al corazón, ya no a la mente. Muéstrate desinteresado, ofrece la prueba social de validación de tus servicios con la cortesía al ofrecer tus productos/servicios de forma gratuita, a esos clientes de 24 kilates y créeme que por reciprocidad, ellos (clientes de 24 kilates) te comprarán luego.

Conocer cuánto vales y lo que ofreces en la forma cómo ofreces y en el nicho donde lo haces, es importante.

También lo es conocer las necesidades de tu cliente. Esto a la larga se traducirá en mayor fidelización y engagement, mejorando la relación y haciéndola duradera y sostenible en el tiempo.