Kim Kardashian explica cómo funcionan los lavabos imposibles de su mansión

La última colaboración de Kim Kardashian con la revista Vogue para grabar su propio episodio del popular formato 73 preguntas ha ofrecido un exclusivo vistazo a su mansión de Hidden Hills valorada en 60 millones de dólares y en la que se instaló junto a su familia a finales de 2017 tras llevar a cabo una reforma intensiva.

La celebridad ha descrito el estilo del interior de la vivienda como un "monasterio minimalista" ideado por el diseñador Axel Vervoordt y su propio marido, Kanye West. De todas las estancias que muestra en el mencionado vídeo, la que más ha llamado la atención de sus seguidores ha sido el gigantesco cuarto de baño decorado en una paleta cromática exclusivamente gris y con unos peculiares lavabos colocados en una isla en el medio de la estancia, con grifos pero sin un sistema de drenaje evidente o una pila para recoger el agua.

Ahora Kim ha querido aclarar a través de su cuenta de Instagram que su lavabo resulta muy práctico en el marco de un tour de su baño en el que ha desvelado que el rapero se encargó de dibujar ese mueble en cuestión, del que se crearon ocho prototipos hasta dar con la versión adecuada.

Su funcionamiento, por otra parte, es muy sencillo: la superficie cuenta con una ligera inclinación que dirige el agua hacia un discreto desagüe en forma de ranura y, según ha asegurado ella, es a prueba de salpicaduras.

Otro detalle curioso es el techo, que resulta ser una "caja que se ilumina por completo", la bañera gigante en la que entran perfectamente sus tres retoños y los interruptores en forma de tres botones dorados incrustados en la pared y sin ningún marco que los rodee.