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- 30/01/2020 00:00
Jaime Lacayo, empresario, decidió incursionar en el mundo competitivo de la gastronomía con los sabores de Asia. Yoi representa una apuesta que busca brindar, a través de la comida coreana, platos sencillos, rápidos y sabrosos.

Respetando el concepto de un fast casual restaurant, que conjuga el dinamismo de la comida rápida y la calidad de los ingredientes, el lugar —que abrió sus puertas en 2017— se muestra amplio y fresco, en un ambiente sencillo para comer a solas o en compañía.
Si hay algo que le distingue de otras apuestas es el pollo frito coreano con su especialidad: el 'honey butter chicken', que traen a nuestra mesa. Una explosión de bocados agridulces, suaves y crujientes.
Pero mucho antes de hacer realidad el proyecto, Lacayo comenzó su primer acercamiento a la cultura coreana en una aventura que le llevó, incluso, a tomar un avión para volar a este territorio.
Firme en el propósito de ofrecer pollo frito coreano, entendió que debía ampliar el menú. “Tenía un producto, pero no un negocio, así que debía pensar en otras cosas que pudiese vender”, cuenta.
“Me fui a la Embajada de Corea, les dije que quería iniciar un restaurante con este tipo de comida sin ofender la cultura y me invitaron a una feria gastronómica en el país asiático”, recuerda.

“Me fascinó visitarlo... La cultura es espectacular; sus espacios pulcros, limpios, avanzados, modernos. Todo lo que comí fue delicioso, pero poco replicable en Panamá, por el picante”, dice.
Al volver, ya con una estrategia más clara sobre los platos y la manera de servirlos, tenía el reto de nacionalizar el producto o hacerlo más local, adaptado a las condiciones y recursos del país.

Lo cierto es que, perdidamente enamorado de su idea, siguió adelante para avanzar con la marca, los colores y todo el concepto creativo.
En la cocina de Yoi, emplean ingredientes nada comunes en los fogones asiáticos de Panamá: el aceite de ajonjolí y el arroz de jazmín.

“Me siento muy contento de lo que tenemos ahora”, reflexiona. En el menú reposan desde platos chinos hasta coreanos, ramen, sopas y 'dim sum'. 'Kimchi rice', 'tang su yuk', 'ramen especial', 'japche', 'pollo gochuang', 'korean bbq wings', 'kimchi fires' y 'jjanjangbap' son solo algunas de las opciones.
Lacayo comparte entre risas que el 'pollo mantequilla miel' es “más rico de Panamá”; la maravilla de la receta es algo que validamos durante nuestra visita.
La preparación no emplea harina, sino almidón de papa, lo que lo hace mucho más liviano. Además, se debe freír dos veces. “Primero se fríe a 10 grados menos de la cocción regular porque se sigue cocinando una vez que lo sacas. Cuando el cliente hace la orden, lo llevamos a la freidora 2 minutos más, lo que logra darle la consistencia crujiente que tiene”, agrega.
Por otra parte, desde Yoi confían en el valor del buen servicio al cliente. “La atención es el corazón y es tan importante como la comida. Debe ser esmerada, pero natural y se debe notar que está en la cultura del lugar”, explica.

Hoy, confiesa que transita junto a su equipo un camino de constantes aprendizajes. “Iniciamos en 'prekínder' y ahora estamos en 'secundaria'. No tenemos postres, pero tenemos una línea de platos principales muy sólida donde me cuesta siempre decidir qué comer”.