- 07/07/2020 16:25
Las alergias son reacciones exageradas del sistema inmunológico frente a sustancias que nuestro cuerpo reconoce como extrañas (alérgenos) y que el sistema de defensas no consigue neutralizar. Esta respuesta causa una serie de reacciones físicas y químicas, responsables de los síntomas de la alergia, según la Organización Mundial de la Alergia.
Esta dolencia puede afectar a diferentes partes del cuerpo como al aparato digestivo si no toleramos ciertos alimentos como la leche o el huevo o determinados medicamentos. El polvo, ácaros, animales, polen o las picaduras de insectos también pueden afectar al aparato respiratorio. También se sabe que las alergias pueden ser hereditarias, por eso, es necesario realizar estudios anticipados en los niños, una vez que han nacido para de esta forma tomar las debidas precauciones y evitar que la enfermedad provoque futuras complicaciones. Entre las dolencias con este tipo de características están el asma, la dermatitis atópica, la rinoconjuntivitis y las la rinitis, esta última con más de 400 millones de personas afectadas en el mundo.
Se estima que el alrededor del 35% de los pacientes con rinitis no recibe un diagnóstico y tratamiento óptimo, ya que usualmente los síntomas, se suelen confundir con un resfriado común. Ante el marco del Día Mundial de la Alergia, a conmemorarse mañana, realizada la los expertos recomiendan no pasar por alto los efectos de esta enfermedad, que cuenta con una prevalencia global de hasta el 25% en los niños y el 40% en los adultos.
La rinitis alérgica es una enfermedad inflamatoria crónica de la mucosa nasal que ocurre cuando una persona susceptible, se expone a partículas derivadas de plantas, animales, polvo, gases, moho, polen y ciertos líquidos como perfumes o cremas, conocidas como alérgenos y que producen una reacción exagerada con síntomas como: estornudos, comezón, escurrimiento nasal y congestión; y en ocasiones falta de olfato.
Según investigaciones médicas, está frecuentemente asociada con el asma: se calcula que 19% a 38% de los pacientes con rinitis alérgica tiene asma y que 85% a 95% de los pacientes asmáticos tienen rinitis alérgica.
Se estima que alrededor del 80% de los pacientes con rinitis alérgica reportan dificultad para dormir y, por lo tanto, presentan fatiga durante el día. Esta enfermedad afecta el rendimiento escolar, la socialización y la productividad en el trabajo.
Alexandra Lokee, directora médica de Sanofi, admite que si un paciente con este tipo de alergias no recibe un tratamiento adecuado, es más propenso a sufrir constantemente molestias, pues es complicado que se aísle totalmente de dichos factores, y por ende, no podrá disfrutar plenamente de las actividades cotidianas, pues termina privando de placeres como disfrutar un día de campo, recibir un arreglo de flores o tener una mascota.
Para evitar la rinitis, actualmente existen fármacos que ayudan a controlar los síntomas por un tiempo prolongado de hasta 24 horas. Por ejemplo, los antihistamínicos de segunda generación (como la fexofenadina) que, en comparación con otros tratamientos, no provocan sueño. Este tipo de medicamentos de venta libre, reduce el congestionamiento nasal, estornudos, ojos llorosos, urticaria, así como picazón de nariz o garganta, comenta la doctora Lokee.
Añade que la falta de información sobre rinitis alérgica ocasiona que los síntomas sean confundidos con el resfriado común o gripe y, por ende, las personas no reciben el tratamiento adecuado, lo que significa un riesgo para las personas afectadas. “Es importante que un médico haga un diagnóstico certero el cual puede incluir una prueba para determinar qué alérgeno detona las molestias, hacer un interrogatorio que brinde información sobre los síntomas como la frecuencia, duración e intensidad, así como una exploración física nasal y, si lo considera conveniente, una endoscopia nasal”, recomienda la médico.
Lokee asegura que con un diagnóstico adecuado, el médico indicará el tratamiento más conveniente para cada paciente, el cual puede incluir una o varias terapias farmacológicas, medidas higiénicas medioambientales, así como lavados nasales salinos que ayuden a limpiar la nariz.
Los cambios de estación, la llegada de las lluvias y el reciente paso del llamado polvo del Sahara, por Centroamérica y el Caribe, también son factores que repercuten en estos pacientes y provocan manifestaciones como irritación ocular, congestión nasal y picazón de garganta. Los expertos recomiendan a la población evitar exponerse a cualquier alérgeno e invitan a quedarse en casa el tiempo necesario y continuar con los medicamentos recomendados por los médicos, sobre hoy cuando la población mundial está sufriendo por la afección de un virus invisible y agresivo denominado covid-19.