La 'covid persistente', sus efectos e impacto en la salud

La pandemia ha revolucionado al mundo desde que se notificó el primer caso positivo en diciembre de 2019. En Panamá, los expertos en enfermedades infecciosas así como los científicos no han parado de investigar y de aprender sobre todos y cada uno de sus aspectos desde las variantes y sus mutaciones.

Uno de los temas de análisis son las secuelas producto de la enfermedad o la llamada 'covid persistente', declarada así por la Organización Mundial de la Salud (OMS), por afectación directa o no del SARS-CoV-2 y que ha transformado la vida de aquellos que contrajeron el virus y superaron la enfermedad.

Xavier Sáez- Llorens, infectólogo y jefe del Departamento de Investigación del Hospital del Niño Dr. José Renán Esquivel, señaló a La Estrella de Panamá que se han identificado más de 40 síntomas que persisten después de la recuperación de covid-19.

“Más que secuelas, hay que llamarle 'covid persistente o largo', porque secuela significa que quedará de por vida, y en el caso de esta enfermedad viral, no necesariamente es así”, dijo.

“La 'covid persistente' es la condición que ocurre en individuos con antecedentes de infección probable o confirmada por SARS-CoV-2, generalmente tres meses después del inicio, con síntomas que duran al menos dos meses y no pueden explicarse con un diagnóstico alternativo. Los síntomas comunes incluyen, entre otros, fatiga, dolor de cabeza persistente, dificultad para respirar, dolor en el pecho y algunas manifestaciones mentales (inestabilidad emocional, pesadilla, neblina mental, es decir que las persona no puede articular bien las palabras o que se le olvidan cosas, además de trastornos de salud mental), problemas en los pulmones, el corazón, riñones, el hígado”.

“Se sabe que la covid-19 es una enfermedad sistémica no exclusivamente pulmonar como sí lo es la gripe común”, expresó el médico.

Aseguró que el individuio que haya padecido covid-19 debe llevar un seguimiento de su condición de salud a nivel médico, precisamente si presenta o manifiesta algunos de los síntomas mencionados.

A la vez, hizo un llamado al Ministerio de Salud (Minsa), al considerar que se trata de un problema que se avecina una vez que se supere la pandemia y “entremos en la fase endémica, puesto que, habrá muchas personas con estos problemas de salud por 'covid persistente', y tanto los centros de salud como las policlínicas deben contar con centros adecuados para atender a las personas que lleguen con estas síntomas”.

“Se trata de una afectación sistémica porque afecta a diferentes órganos, y muchos de estos síntomas persisten e incluso se han dado casos de problemas cardiovasculares como miocarditis, arritmias, hasta infartos y formación de trombos posterior a la infección por la covid-19”, explicó el galeno.

Agregó que la 'covid persistente' se ve más en personas que han padecido la enfermedad de forma más intensa (sintomático) y menos en aquellos con covid-19 leve. “Muchos de estos síntomas pueden revertirse y desaparecer con las semanas o meses, pero hay algunos que siguen presentes hasta un año después, sobre todo aquellos neurológicos, de fatiga o cardíacos”, subrayó.

Igualmente detalló que hay personas que meses después siguen con problemas de olfato y gusto y tienen que ser entrenados por otorrinos.

Otra de las consecuencias derivadas del coronavirus es la disnea o “la sensación de falta de aire que siguen teniendo algunos pacientes después de haber sido dados de alta”, así lo explicó Germán Peces Barba, vicepresidente de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ), quien señaló en Gaceta Médica que la mayoría de las veces no existe una causa concreta, sino que es multifactorial.

En este sentido, el neumólogo recordó que la afectación muscular en muchos pacientes que han sufrido covid-19, puede derivar en la mencionada disnea.

En este orden, las secuelas neurológicas también pueden contribuir a un déficit de la fuerza muscular, así como un déficit de la función cardíaca.

Por otra parte, la afectación cardiológica ha sido una de las cuestiones que más ha preocupado. Aún así, y debido a que todavía se trata de una enfermedad nueva que precisa de una mayor experiencia clínica, el impacto de la misma “a mediano y largo plazo aún es un poco una incógnita”, explicó a Gaceta Médica, Ángel Cequier Fillat, presidente de la Sociedad Española de Cardiología (SEC), quien apuntó a una mayor precisión del conocimiento de las complicaciones que han aparecido en la fase aguda.

En ella, “algunos pacientes han presentado miocarditis, otros incluso muerte súbita. También en esta fase, en algunos pacientes la enfermedad coronaria se ha inestabilizado. Ahí sí que han aparecido más pacientes con problemas como infarto agudo de miocardio o también insuficiencias cardíacas al descompensado”, añadió.

Según la OMS la 'covid persistente' deja en muchos pacientes diferentes síntomas, incluso tras recibir el alta, un problema que la comunidad científica denomina ya 'covid largo', lo cual puede tener graves efectos socioeconómicos.

“Es bueno que esté empezando a investigarse, pero los estudios no son suficientes y deben continuar”, señaló el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, durante una reunión con científicos este mes sobre el tema.

A su vez indicó que “reconocer la existencia de la 'covid larga' significa no sólo ver su impacto individual, sino también el social”.

Durante esa reunión, la doctora Gail Carson, de la red internacional de investigación de dolencias respiratorias (Isaric), subrayó que la 'covid larga' puede pronto ser el principal problema de la pandemia, pero que menos de uno de cada 100 estudios sobre la covid-19 se dedica a este tipo de pacientes, según publicó la agencia EFE.

Los médicos citaron la fatiga, la llamada 'niebla mental' o problemas neurológicos (ansiedad, depresión) como algunos de los más de un centenar de síntomas descubiertos en personas que han pasado la covid-19, en algunos casos hasta medio año después de ser dados de alta, igual como lo planteó Saéz-Llorens.

Dale Needham, de la Universidad Johns Hopkins, lo relacionó con estudios ya realizados antes de la pandemia y que hablaban del 'síndrome posterior al cuidado intensivo', que reveló algunos de estos síntomas en pacientes que habían tenido que ser internados en UCIs por distintas enfermedades.