Un país que requiere de ingenieros

Actualizado
  • 17/05/2015 02:00
Creado
  • 17/05/2015 02:00
Los jóvenes no estudian ingeniería por muchas razones, entre ellas, que el trabajo abunda y la paga escasea

Según las estadísticas que se manejan por parte de varias instituciones relacionadas con la educación, existe un déficit de personal especializado en las tecnologías de la información y las comunicaciones.

Los jóvenes no estudian ingeniería por muchas razones, entre ellas que el trabajo abunda y la paga escasea. Otras carreras son mucho más ‘sexys' y no requieren tanto trabajo.

El problema no es solo por estos lares. En Estados Unidos tuvieron que abrir las visas para ingenieros y personal tecnológico, pues la mayoría de las personas que trabajan en los startups relacionados con estos temas, provienen de India, países asiáticos e incluso Latinoamérica.

En nuestra región la cosa es más complicada si tenemos en cuenta que nuestros sistemas educativos están retrasados en comparación con otras regiones del mundo. Es necesario articular el currículum desde kínder hasta la universidad para lograr que desde niños nuestros jóvenes pierdan el miedo a crear nuevas tecnologías y a generar proyectos con alto componente innovador.

Personalmente, he tenido la oportunidad de apoyar proyectos en América Latina, donde se enseña a personas muy jóvenes y a emprendedores de todo tipo, a ‘embarrarse las manos de código', a programar sus propias herramientas y unirse con otras personas para sacar adelante sus proyectos.

Si usted desea comenzar a aprender sobre estos temas, existen cientos de opciones en internet que permiten aprender sin costo alguno y conectar con otras personas que también están en el proceso de internarse en el mundo de las TIC.

Las TIC (tecnologías de la información y las comunicaciones) son además excelentes herramientas para trabajar con los jóvenes, incluso aquellos que se encuentran en riesgo social, gracias a los esquemas de software libre y de código abierto. Es posible montar un laboratorio de creación de aplicaciones con una inversión realmente pequeña, donde el talento de aquellos que desean aprender se destaca de una forma rápida.

Debemos presionar para que en las escuelas tanto públicas como privadas, se trabaje de forma decidida en la implementación de programas de actualización, tanto de docentes como de educandos.

Los trabajos se han redefinido, las organizaciones ya no funcionan como antes y la competencia a la que ellos se enfrentarán es global. Debemos darles las mejores herramientas posibles para que se enfrenten al mundo tan competitivo en el que vivirán. No es justo con ellos el soltarlos en ese ecosistema sin las herramientas necesarias.

Por lo pronto yo decidí volver a programar. Desde hace tiempo que me especializo en otras áreas, pero creo que tener práctica en esto puede ayudarme a entender ciertos procesos que hoy son cada vez más relevantes en el ecosistema de la economías digitales de hoy en día.

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Pedro Colmenares

ASESOR TIC

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