La Policía Nacional aprehendió al alcalde electo de Pocrí por presunto peculado, tras una investigación relacionada con proyectos no ejecutados del Conades...
- 27/06/2010 02:00
TORONTO. Los líderes de las mayores economías del mundo buscaban, ayer sábado, un enfoque común para asegurar la recuperación económica global, que hasta el momento ha sido desigual y muestra indicios de desvanecerse.
El Grupo de Ocho naciones industrializadas (G-8) se reunió por segundo día en un centro vacacional en el norte de Toronto, seguido por una cumbre en la capital canadiense de la agrupación de naciones ricas y emergentes, el G-20.
Los líderes G-20 no acordaron aplicar obligatoriamente impuestos a los bancos, pero mencionarán la alternativa para los países que deseen aprobar la medida, según el borrador del comunicado de la cumbre en Toronto al que Reuters tuvo acceso.
Una fuente del grupo afirmó que la declaración final de los líderes se centrará en la economía, la regulación financiera y una reforma a las instituciones internacionales, pero no contará con recomendaciones específicas para los países.
La recesión global llevó a una recuperación de tres velocidades, con el crecimiento de Asia en la cabecera, la recuperación estadounidense avanzando lentamente y Europa rezagada.
Como resultado, la unidad del G-20 se está fracturando, con los líderes en desacuerdo sobre cómo salvaguardar mejor la recuperación. El desempleo permanece elevado en la mayoría de las economías avanzadas y el crecimiento disminuyó desde fines del año pasado.
‘Honestamente, creo que la economía mundial enfrenta un número de incertidumbres’, dijo el primer ministro de India, Manmohan Singh, a Toronto Star. ‘Mientras salía gradualmente de la profunda depresión o profunda recesión, tuvimos la crisis de la zona euro y la crisis de la deuda soberana’, agregó.
El primer ministro canadiense, Stephen Harper, ‘apunta que si el G-20 será el primer foro económico internacional, necesitará tomar medidas adicionales para proteger la recuperación y poner en marcha un crecimiento fuerte, sostenible y equilibrado’, esto según un funcionario del G-20.
Hablan del Yuan
Algunos países desean elogiar la decisión de China de alterar su tipo de cambio en el comunicado de una cumbre, pero Pekín se opone a que su divisa sea mencionada, dijeron el sábado fuentes del G-20.
Beijing anunció el sábado pasado que pondría fin una paridad de facto del yuan respecto al dólar estadounidense, que había estado en vigor por cerca de 2 años. Washington y otras capitales habían presionado por largo tiempo a China para que permita que su moneda se aprecie. Los líderes del G-20 se reunieron la última vez en Pittsburgh en septiembre.