CADE aborda el reto de competitividad global

Panamá competitivo para una economía global, ¿estamos listos? Con esta interrogante inaugura mañana, 25 de abril, la Conferencia Anual de Ejecutivos (CADE).

Los escenarios del encuentro se enfocarán en cuatro ejes: tecnología, crecimiento, competencias humanas e institucionalidad, explicó Héctor Cotes, presidente de la Asociación Panameña de Ejecutivos de Empresa (Apede), gremio organizador del evento.

Cotes sostuvo que la disyuntiva en la que estamos, donde el país crece pero este crecimiento no se percibe en las calles, demanda un crecimiento sostenible e inclusivo para que perdure.

LA CITA

CADE se realizará del 25 al 27 de abril en la capital panameña

Tendrá cuatro polos temáticos: tecnología, crecimiento, capacidades humanas e institucionalidad.

El orador inaugural será Roberto Artavia, presidente de Viva Trust y directivo de Incae. Además contarán con un panel de CEO.

La primera sesión la abrirá Roberto Artavia, presidente de Viva Trust y directivo de INCAE, además el panel CEO contará con expositores nacionales e internacionales.

El énfasis en las fintech será un tema central en CADE. Para Cotes, la tecnología cae muy bien con el proyecto de ley que está presentando el Ministerio de Economía y Finanzas para modernizar el sistema financiero panameño. Bancos, innovadores tecnológicos e inversionistas se conjugan en un sector, que ‘de hacer las cosas bien', tiene mucho potencial para ser un jugador estelar dentro del aporte al PIB en el país.

‘Lo que falta es justo el marco legal adecuado para captar esas inversiones de la empresa privada y el sector gobierno con el marco legal... si no, nos va a dejar el tren', apuntó.

El tema ‘Panamá competitivo para una economía global' tiene como objetivo general promover que tanto las empresas como el gobierno tomen acciones sobre estos temas, se generen oportunidades de negocios y compromisos institucionales que se traduzcan en un desarrollo sustentable del país.

Para los organizadores, las oportunidades surgen cada vez de manera más disruptiva y urge asumir compromisos para que se traduzcan en realidades que mejoren el bienestar equitativo de todos los habitantes, y la educación es la clave.