Repercusión de las tasas de interés en las economías emergentes

Actualizado
  • 02/02/2019 01:01
Creado
  • 02/02/2019 01:01
No solo naciones del mundo desarrollado ven una oportunidad en la no potencial alza de las tasas de interés

En la última década, a partir de la crisis financiera, los mercados emergentes y sus denominadas economías frágiles han sido escenario de altas y bajas que se pueden atribuir a una diversidad de factores particulares. Sin embargo, estas economías comparten una exposición en común, denominada las tasas de interés de la Reserva Federal.

A dos días de finalizar el primer mes del período 2019 somos testigos de la materialización de las predicciones que administradores de activos e inversionistas en el ámbito internacional pronunciaban a mediados del último trimestre 2018 con respecto a la no potencial alza de las tasas de interés por parte del Comité de la Reserva Federal (FOMC) de Estados Unidos para el período 2019. Las predicciones fueron confirmadas por Jerome Powell, Jefe de la FED, quien hizo mayor énfasis en que se guardará paciencia con relación a las acciones a tomar sobre dicha herramienta de política monetaria.

Dicho pronunciamiento ha motivado un mayor optimismo en el mercado accionario, principalmente en el de Estados Unidos donde los índices como el S&P y el DJI, ambos reflejos del comportamiento del mercado estadounidense reportan un alza de +1.55% y +1.77% respectivamente.

Pero no solo corporaciones y naciones del mundo desarrollado ven una oportunidad, los mercados emergentes también podrían estar frente a un escenario que promete la recuperación del impacto negativo contra su desarrollo y crecimiento resultado de la política monetaria contractiva que radicó en constantes alzas de las tasas de interés por parte de la FED entre los períodos 2015 y 2018 (ver tabla).

PERÍODOS DE AUGE 2009-2014

A partir de la crisis financiera 2008-2009 y la herramienta de política monetaria expansiva aplicada con motivos de estímulo, se dio paso a lo que significaría un período con mucho optimismo en cuanto al desarrollo y crecimiento de las economías emergentes, principalmente de aquellas clasificadas como economías frágiles, entre estas Sur África, India y Turquía.

Dicha herramienta consistió en ofertar una baja tasa de interés que promovió en los mercados facilidades crediticias a costos accesibles lo cual otorgo oportunidad a que las corporaciones y las naciones del mundo emergente se abastecieran de los fondos que requerían mediante la emisión de deuda corporativa y soberana denominada en dólares estadounidenses.

La motivación a obtener liquidez frente a un dólar depreciado fue tan amplia que para el período 2013 la deuda del mercado emergente global alcanzó cerca de $49 billones, monto que representa aproximadamente el 47% del crecimiento de la deuda total entre el año 2007-2013.

Por otro lado, la Inversión Extranjera Directa (IED), tanto del mercado accionario como el mercado de bonos emergentes, también aumentaba. El interés se ve reflejado en el reporte de flujo de capitales para el 2014 que see acercaba a los $1.22 billones.

Con la liquidez en manos, resultado del acceso al crédito y los flujos provenientes de no residentes, los promotores del sector privado y público de los mercados emergentes tuvieron la posibilidad de impulsar sus operaciones, invertir en infraestructura y financiar sus déficits fiscales. La expresión más exacta la ilustran los %PIB, que superaban el 7%.

Por otro lado, sumado a la inyección de liquidez, frente a un dólar débil como resultado de la baja tasa se reporta el alza en los precios de las materias primas ‘commodities'. Y dado que estas economías se caracterizan por ser grandes exportadores de materia prima, sus industrias en este ámbito también se vieron positivamente impactadas aportando mayor favor al optimismo que reinaba a la fecha.

2015 INICIO DE CRISIS

Como en la economía los períodos de ímpetu son un paso a los períodos de contracción, no se podía haber pronosticado con mayor exactitud que los mercados emergentes se verían afectadas frente a la toma de acciones con respecto a la política contractiva que aplicaría la FED a partir de diciembre 2015 frente a un panorama que proyectaba mejores resultados.

Iniciado el alza gradual de las tasas, el dólar estadounidense se recupera y la deuda que había sido contraída bajo términos atractivos como resultado de un dólar débil, se tornó en un promotor de desconfianza frente a la capacidad de pago de las corporaciones y las naciones del mundo emergente.

Sumado a esto, la IED comenzó a desestimularse, reflejándose así los efectos en las decisiones de relocalización de capitales por parte de accionistas y prestamistas que se vieron atraídos por los rendimientos potenciales que prometían las economías desarrolladas como consecuencia de un dólar apreciado.

FICHA

La autora conduce el segmento ‘Su ventana financiera' en @Estrellaonline

Nombre completo: Laritza del Rosario Lezcano Navarro

Ocupación: Consultora Financiera

Resumen de su carrera: Master en Inversiones y Finanzas y Diplomado de Economía y Finanzas de la Universidad Queen Mary University of London. Licenciatura en Contabilidad, Banca y Finanzas de la Universidad Santa María La Antigua de Panamá. Experiencia laboral en auditoría comercial, análisis financiero e implementación de análisis cuantitativo.

Así se corrobora en las cifras publicadas en reporte sobre los flujos de capitales a mercados emergentes emitido por el Instituto de Finanzas Internacionales (IFI, octubre 2018). Para el período 2015, la IED disminuyó aproximadamente 23% como resultado de una reducción del 32% en el mercado de bonos. En los períodos subsecuentes, 2016 a la fecha el comportamiento ha sido similar. Las cuatro últimas alzas reportadas en el 2018 fueron el período de mayor repercusión.

Y no nos olvidemos de las materias primas, que frente al dólar apreciado reportaron depresión en los precios, como resultado de activos que requerían un menor desembolso de dólares para ser adquiridos. Por ejemplo, en el Sur de África se reporta una caída del precio del platino, metal precioso cuya industria ha tenido que enfrentar reestructuraciones que afectan la estabilidad de la sociedad civil como resultado de las reducciones de planilla, entre otros. A mediados de junio 2018, el platino llega a reportar una depresión de valor del 40%. Por otro lado, mercados de gran exportación en Latinoamérica, como Brasil, también han tenido que hacer frente a la caída de precios. Un claro ejemplo es la soya, cuyo valor ha disminuido un 54% entre el período 2012 al cierre 2018.

2019, ¿UN NUEVO ESCENARIO?

En el panorama actual se confirma una estabilidad en lo que a las tasas de interés de la FED respecta.

Los participantes de mercado han comenzado a reconsiderar la perspectiva económica que se tenía de los mercados emergentes. Muchos han dado señales de interés que pueden vislumbrar un nuevo atractivo y llamar a tomar participación.

Sin embargo, no podemos ignorar que existen otras herramientas de política monetaria con potencial aplicación que podrían significar nuevos retos, no solo para los mercados emergentes sino también para la estabilidad de los mercados financieros internacionales.

Lo Nuevo
comments powered by Disqus