El avión pudo cambiar de rumbo

MALASIA. La Fuerza Aérea de Malasia informó que el desaparecido avión de pasajeros Boeing 777 se desvió de su ruta hacia Beijing y se dirigió hacia el estrecho de Malaca, a cientos de kilómetros de la última ubicación detectada por autoridades civiles.

El jefe de la fuerza aérea de Malasia, el general Daud Rodzali, dijo que un radar de una base militar malaya detectó al avión a las 2:40 de la mañana cerca de Pulau Perak, en la parte norte del estrecho, un canal muy transitado que separa la costa occidental de Malasia de la isla indonesia de Sumatra. ‘Después de eso, se perdió la señal del avión’, indicó.

Un funcionario militar de alto rango que participa en la investigación señaló que se cree que el aparato volaba a baja altura.

De confirmarse estos datos, el avión desaparecido el sábado pasado con 239 personas a bordo pudo haber volado durante una hora con rumbo suroeste sin emitir comunicación alguna detectada por radares civiles antes de desaparecer en medio del estrecho de Malaca, entre Indonesia y Malasia.

Hasta ahora, el último punto de contacto con el avión malayo, registrado por controladores aéreos, se había situado sobre el golfo de Tailandia, de acuerdo con una torre de control de Vietnam.

TERRORISMO SIN DESCARTE

John Brennan, director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), dijo ayer que la posibilidad de un vínculo terrorista no puede desacartarse aún. ‘No, no lo descartamos. En lo absoluto. No se puede descartar ninguna teoría’, afirmó Brennan.

Las declaraciones de la CIA contrastan con lo que dijo anteriormente el secretario general de la Interpol, Ronald K. Noble, quien descartó un vínculo terrorista.

‘Mientras más información recibimos, más nos inclinamos a concluir que no se trató de un incidente terrorista’, indicó Noble.

Además, la agencia policial internacional confirmó la identidad de dos nacionales iraníes que usaron dos pasaportes robados para abordar el avión.

Los hombres son Seyed Mohammed Reza Delavar, de 29 años de edad, y Puria Nourmohammadi, de 18. La Oficina Central Nacional de Interpol en Teherán también confirmó que ninguno de los hombres tenía antecedentes penales y ambos salieron de Irán de manera legal. ‘Ahora estamos pidiendo la ayuda del público para proporcionar información adicional sobre sus movimientos’, agregó Noble.