El reino de las armas

  • 09/03/2015 01:00
El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, ha pedido la creación de un ejército europeo

No bastan todos los ejércitos regulares e irregulares que existen actualmente en el mundo, hay quienes consideran que se necesitan más. El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, ha pedido la creación de un ejército europeo. Medios alemanes indicaron que Juncker sustentó su iniciativa, la cual fue respaldada por la OTAN y varios gobiernos de la UE, en que este ejército tendría como objetivo responder a cualquier supuesta amenaza proveniente de Rusia o de otro bloque. ¿Por qué la iniciativa de Juncker se produce en medio de un acelerado y frágil acuerdo de paz en Ucrania? ¿Qué hay detrás del alambicado mundo de las guerras, los ejércitos y las armas?

Es un tema opaco, clandestino y lleno de agujeros donde operan cientos de empresas privadas que producen armas convencionales. Trabajan en la sombra de cada gobierno. Nos referimos al negocio mundial de la venta de armas, que genera 70 mil millones de dólares de ganancias. Es un negocio de gobiernos y empresas privadas en alza.

Ningún político asocia lo que el negocio deja en paralelo: 750 mil muertos y heridos. No se habla de ello, pues la hipocresía también está en alza. Lo curioso es que hay tratados internacionales para el control de la producción de armas químicas, biológicas y nucleares.

No existe ninguna regulación internacional para controlar el negocio de la producción de armas convencionales, la principal amenaza real para los conflictos en los países del Tercer Mundo.

El negocio de la venta de armas convencionales, según datos del Instituto de Investigación de Estocolmo para la Paz (SIPRI, en inglés), está desbordándose. En 2014, las empresas privadas que concentraban la mayor producción global de venta de armas seguían perteneciendo a EEUU, Rusia y Europa Occidental, además de China. Sin embargo, el panorama empezaba a cambiar. Rusia incrementó sus ventas, en cambio, 38 de las 100 empresas de armas a nivel mundial, que son estadounidenses, disminuían sus ganancias. Según SIPRI, el problema a nivel planetario empeora, pues otras empresas emergen el opaco mundo del negocio de las armas y pertenecen a Turquía, India, Brasil, Singapur y Corea del Sur. Todos por el negocio.

Lo Nuevo