Decenas de famosos alabaron este lunes el estilo de los dandis negros y lucieron conjuntos de sastrería extravagantes en su honor en el preludio de la...
- 13/06/2013 02:00
Las crueles experiencias derivadas del capitalismo salvaje que hemos sufrido por generaciones las seguiremos sufriendo millones de pobres si no nos atrevemos a enfrentarlo. Difícilmente podrá ser igualado este tenebroso sistema en sus violaciones a los derechos humanos. China y su pueblo, no es la excepción. Por derecho natural, avalado además por la globalización occidental, China puede y debe entrar a competir, en toda iniciativa que los afecte o involucre en un nuevo orden internacional de intercambio e inversiones —que todos reclaman— como lo es la posibilidad de un nuevo canal interoceánico por Nicaragua. Ambas naciones están en su derecho.
Está claro, que, a los beneficiarios y especuladores tradicionales de la geopolítica mundial no les hace gracia esta participación y no vacilarán en atacarla, incluyendo a los países que se atrevan a recibir, no solo a China, sino a cualquier otro inversionista que no sea de su clan. Nicaragua está en su derecho a poner en valor su posición geográfica y económica, y China como gran usuario del transporte marítimo internacional. No se trata de que esta posible construcción obedezca a intereses geopolíticos externos, se trata de una iniciativa con todo derecho, en beneficio del empobrecido pueblo nicaragüense, o ¿acaso DEBEN continuar padeciendo pobreza y muerte a manos de un sistema occidental discriminador, invasor y deshumanizado? Bienvenida la inversión China a Centro y Sur América. Los propios EEUU tienen inversión china en puertos y empresas y, cuidado, con los bonos del ‘tesoro’. No le toquen la cola al dragón dormido. Por lo menos, China invierte antes de explotar ni avasallar a estos pueblos discriminados y vilipendiados por occidente por generaciones. El comercio mundial necesita de un nuevo orden económico y de intercambio, libre, desde hace décadas. Necesita oxigenarse del asfixiante, injusto, saturado y desleal mercado tradicional tripolar EEUU-UE-Japón. Las actuaciones falaces, temerarias y desestabilizadoras no faltarán ante esta etapa progresista. De hecho, tratan de enfrentar hermanos contra hermanos, países vecinos, espían con diversas modalidades, contaminan criminalmente, asesinan teledirigidamente y todo lo inimaginable que involucran para mantener el dominio mundial. Así sigue siendo este sistema salvaje como lo ha denunciado el Papa Francisco, el Papa de los pobres, quién no estará exento de ser acusado y vilipendiado, y, cuidado no sea asesinado, como lo previne desde su ascenso al trono de San Pedro. Pero, la verdad viene siendo puesta al descubierto por jóvenes soldados, a través de periodistas, héroes incólumes, de los que se sirve Dios para defender su creación, amenazada de extinción por políticas y políticos corruptos y desalmados.
MUNDO EN MARCHA