Carles no le guarda resentimiento a los ngäbes

Con cuello ortopédico y aún resintiendo los golpes recibidos a razón de la reforma minera, Luis Ernesto Carles, viceminsitro de Trabajo y Desarrollo Laboral, se presentó en el salón Azul de la Asamblea Nacional.

Los sustentos de su aspiración a defensor del Pueblo los inició haciendo referencia a sus padres.

Tras plantear por qué considera importante la labor de la entidad que desea dirigir, mencionó su papel en el consenso logrado en la Ley 30, mejor conocida como "Ley Chorizo".

También esbozó su trayectoria en países como Nicaragua y Guatemala, en programas para la post guerra.

Luego de concluida la presentación de Carles los diputados procedieron al periodo de preguntas.

Yassir Purcait, miembro de la Comisión de Gobierno, consideró pertinente conocer qué actitud tendría el Viceministro en caso de presidir la Defensoría frente a la población de San Félix, pueblo ubicado en el oriente de la provincia de Chiriquí, donde este aspirante fue agredido durante las manifestaciones contra las reformas mineras.

Carles, con mucha calma, expresó que no guardaba ningún resentimiento contra los indígenas ngäbe buglés, originarios del lugar mencionado, ya que ellos mismo fueron quienes le ayudaron a salvar su vida.

Por último, Purcait le cuestionó así: "¿Es usted el ungido del Gobierno Nacional? ¿Ricardo Martinelli pidió a usted que se inscribiera como candidato a defensor del Pueblo?" Al paso, el postulante le respondió: "no".

La intervención de Carles ha sido la octava. A él le antecedió Luis Adolfo Corro.

En el Salón Azul también se han hecho presente Cristina Torres, Rosario Sarasqueta, Modesto Cerrud Duarte, Francisco Mendizábal, Luis Orlando Cortez y Manuel Burgos.

El proceso de elección de defensor del Pueblo debe finalizar el 22 de febrero. Esta figura fungirá en este cargo desde este año hasta el 2016.