Un diplomático panameño que conoció a Benedicto XVI y Juan Pablo II

Lawrence Edward Chewning Fábrega es uno de los panameños que ha estado más cerca del ahora Papa emérito Benedicto XVI y también conoció a Juan Pablo II.

El hoy director de la Carrera Diplomática y Consular de la Cancillería de Panamá en abril de 2005 fue avisado por la secretaria de la Embajada de Panamá ante la Santa Sede que ya se había elegido al Papa, tras la muerte de Juan Pablo II.

El diplomático estaba en el corazón de Roma y se acercó, rápidamente, junto a su esposa, hasta la Plaza de San Pedro y así ver el 'humo blanco' y apreciar al nuevo Papa.

Chewning Fábrega era el embajador de Panamá ante la Santa Sede y estuvo viendo el humo blanco y contempló al cardenal alemán Joseph Ratzinger convertido en el Papa Benedicto XVI el 19 de abril de 2005.

Por espacio de aproximadamente media hora veía el humo blanco y luego salió el camarlengo al balcón principal de la Basílica de San Pedro y anunció: "Habemus Papam".

Aún recuerda, lo emocionante del momento, los vítores por todos lados: "Viva el Papa", "Viva el Papa". Era una elección a solo 17 días del fallecimiento de Juan Pablo II.

"Yo nada más de acordarme quedo despelucado, con los pelos de punta", confesó atento a la entrevista.

Chewning Fábrega relató a LaEstrella.com.pa momentos inolvidables ya que fue embajador de Panamá ante la Santa Sede durante el pontificado de Juan Pablo II y el inicio de Benedicto XVI.

Lo recuerda como un hombre muy humilde, muy sencillo, de una mirada fija y un apretón de manos fuerte a pesar de su avanzada edad.

Cuando se despidió de la misión diplomática, pidió una audiencia con Benedicto XVI, éste le regaló un rosario a su esposa, su hija y a él; el religioso le obsequió un libro escrito por él.

En ese entonces era embajador de Panamá ante la OEA y visitó Roma, iría a una misa privada del Papa que le había gestionado Laghi.

Laghi fue Nuncio Apostólico en Washington y le había bautizado a tres de sus hijos.

Chewning Fábrega conocería a Juan Pablo II en la pequeña capilla contigua a la habitación del Pontífice. Cita a la que debía ser puntual.

"Fue algo extraordinario...", recordó y mostró una fotografía colocada en una mesita cercana a su escritorio en la Cancillería donde aparece Juan Pablo II, su esposa y él. Es un recuerdo que le llena el alma, la alegría salta a la vista.

Juan Pablo II le dijo que recordaba el gran recibimiento que le dio el pueblo panameño en aquella visita.

Según narró, el Papa hizo mención del pueblo de Atalaya, en Veraguas, y la devoción por Jesús Nazareno de Atalaya, actividad que se celebra el primer domingo de Cuaresma.

Juan Pablo II pisó tierra panameña el 5 de marzo de 1983, día que tuvo palabras especiales para los panameños y hasta visitó la Catedral Metropolitana.

Panamá está en la mente de los religiosos, pues incluso, el cardenal Tarcisio Bertone, ahora actual camarlengo y quien está a cargo de la Iglesia Católica, le decía a Chewning Fábrega: "usted es el embajador de la tierra de Don Bosco".

Bertone le comentaba que había participado de las novenas y procesión de Don Bosco, pero no había visto una emoción tan grande por el santo italiano como en Panamá.

"Entre ellos van a definir cuál es el perfil del nuevo Pontífice".

En la residencia de "Santa Marta", en el interior del Vaticano, donde se alojan los cardenales estarán incomunicados y analizarán la responsabilidad para el nuevo Pontífice.

A las 8 de la noche, hora de Roma, del jueves 28 de febrero, se hacía efectiva la renuncia de Benedicto XVI y ahora hay "Sede Vacante".

Benedicto XVI renunció a su pontificado el lunes 11 de febrero de 2013 alegando que no tiene fuerzas.

El cardenal Bertone, secretario de Estado Vaticano, actual camarlengo y está a cargo de la Iglesia Católica.

En la Iglesia Católica, el camarlengo es un funcionario de la corte papal. Es el administrador de los bienes y los ingresos de la Santa Sede.

Chewning Fábrega, quien fue embajador de Panamá en Gran Bretaña, Bélgica, Washington y ante la OEA, contó que conoció al cardenal Bertone y le guarda mucha simpatía.

"Es una persona sumamente agradable, muy inteligente y un hombre muy de Dios".

La fecha en que iniciará el cónclave tendrá que ser definida por los cardenales congregados en el Vaticano, sino antes del 18 de marzo.

En las últimas sucesiones el proceso de elección del Papa ha demorado entre dos y tres días, aunque hay casos en que han sido necesarias más de 10 votaciones: Juan Pablo I (1978): duró 2 días, se hicieron 4 votaciones; Juan Pablo II (1978): duró 3 días, se hicieron 8 votaciones y Benedicto XVI (2005): duró 2 días, se hicieron 4 votaciones.

Al respecto, el diplomático panameño pidió rezar mucho, pedirle a Dios "que ilumine a los miembros del Colegio Cardenalicio para que sea el Papa que la iglesia merece" y alegó "solo estamos en las manos de Dios".