Se agudiza pugna por tierras en Bayano

Un grupo de colonos que quedaron dentro de la Comarca Guna de Madungandí está en pie de guerra ante la posibilidad de ser desalojados de sus tierras a consecuencia del fallo favorable a los indígenas de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

Antonío Nieto, vocero de los colonos, prometió defender, hasta con la vida si es necesario, la tierra en la que ha vivido desde 1982 y de la que teme ser desalojado. En el fallo de la CIDH se pide que se corrija la falta de delimitación de la comarca y las tierras colectivas de Altos Bayano.

‘Presidente (Juan Carlos Varela) si hay desalojos estamos dispuestos a defender las tierras de cualquier manera', advirtió Nieto.

En el área en conflicto residen 163 familias campesinas, que suman mil personas.

Nieto, quien vive en Tortí Abajo, en Chepo, vislumbra disputas entre latinos con policías o latinos con indígenas, por el derecho a vivir en estas tierras. Sus propiedades quedaron dentro de la comarca creada por la Ley 24 de 12 de enero de 1996 a partir de territorios segregados de Chepo.

Por su lado, el abogado de los campesinos, José Saldaña, explicó que la comarca se creó con 180 mil hectáreas, pero ya tiene unas 231 mil.

‘El fallo no dice desalojar campesinos. Los gunas de Madungandi extendieron sus límites... señor presidente, usted tiene un romance con los grupos originarios para quedar bien', cuestionó Saldaña.

Varela estuvo este martes en Bayano para pedir disculpas, en nombre del Estado panameño, a los indígenas gunas de Madungandí y a las comunidades Emberá de Ipetí y Piriatí por los daños causados a sus territorios durante la construcción del proyecto hidroeléctrico de Bayano en 1976.

El gobernante también hizo entrega de $2.6 millones en concepto de indemnización. para los indígenas.