Chiquita se querella contra alcaldesa de Changuinola

Actualizado
  • 30/06/2018 02:00
Creado
  • 30/06/2018 02:00
La alcaldesa Estella Stephenson ha segregado y vendido terrenos que foman parte de la concesión que tiene la bananera con el Estado. Una realidad que se viene repitiendo desde administraciones anteriores

La empresa bananera Chiquita Panamá se querelló contra la alcaldesa del distrito de Changuinola, Estella Stephenson, así como contra otros funcionarios del Consejo Municipal y particulares, por el supuesto delito de abuso de autoridad e infracción de los servidores públicos en detrimento de la fe pública y la seguridad pública, este último en la modalidad de asociación ilícita.

La empresa también se querelló en contra de la pasada administración alcaldicia, a cargo de Virginia Ábrego, por los mismos tres delitos. Ambas querellas penales están relacionadas con la segregación y venta de terrenos que forman parte de la concesión que mantiene Chiquita Panamá con el Estado.

Hemos detectado que el funcionario de la Anati es el mismo que hace los planos y los aprueba ',

MOISÉS BARTLETT

ABOGADO DE LA EMPRESA BANANERA

Las querellas, que también son en contra de funcionarios de la Autoridad de Administración de Tierras (Anati), fueron presentadas el pasado 7 de junio y hasta la fecha el Ministerio Público no las ha admitido.

Entre los terrenos segreados y vendidos se encuentran áreas destinadas tanto para la producción de banano, como para la administración de la empresa.

Dentro del área administrativa de Finca 8, en Changuinola, por ejemplo, la empresa ha podido detectar cinco segregaciones inscritas por parte del Municipio de Changuinola. Los terrenos - donde se encuentran la escuela de la compañía y el patio de las casas de administrativos —que actualmente están habitadas— han sido vendidos a terceras personas entre naturales y jurídicas, como Mehdy International, S.A.

Esta sociedad, según informaciones obtenidas por la empresa bananera, tiene como representantes a Amir Tariveh Romero y a Masoud Tariveh, que son comerciantes de Changuinola.

El modus operandi era el mismo: el Municipio segregaba el terreno y lo vendía a una persona que, a su vez, los traspasa a un tercero por el mismo precio que lo adquirió a la Alcaldía.

En algunos casos todo el proceso se hacía en menos de tres meses. En la querella contra la actual alcaldesa, Estella Stephenson, se cita el caso del 8 de enero de 2018, cuando se inscribió en el Registro Público la escritura 450 del 26 de diciembre de 2017 expedida por la Notaría Especial de Changuinola en la que se da la venta de la Alcaldía a Abdiel Díaz de un terreno por la suma de $1,957.

El 17 de enero, Díaz vende el terreno que ya se había constituido en la finca No. 30251405, a Guillermo Staff Aizpurúa por un valor de $2,000. Un mes después, el 16 de febrero, la finca fue vendida al ciudadano chino Guinpin Pan por el mismo precio.

Guinpin Pan, luego de adquirir la finca, quiso ocuparla y fue cuando la empresa bananera detectó estas irregularidades que, ahora, descubren que se realizan desde hace por lo menos doce años. Algunos compradores, incluso, han hipotecado la finca, dijo Moisés Bartlett, abogado de la empresa y quien presentó la querella penal.

Explicó que el problema es bastante grave porque también han detectado que el funcionario de la Anati que aprueba los planos era el que los hacía. Es decir, realizaba prácticas privadas que luego, como funcionario, las aprobaba.

En uno de los terrenos que han sido segregados y vendidos se promociona un proyecto habitacional.

Para el abogado Bartlett, esas ilegalidades no solo afectan a la empresa sino también al Estado porque se lesiona los compromisos contractuales que se han adquirido con la empresa bananera.

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