El ático

AÚN NO TERMINA Pese a todas las promesas de la empresa MiBus y del gobierno nacional, el mal servicio del Metrobús continúa. Paradas repletas de pasajeros ya casi conformes ante la falta de solución y buses que llegan a las paradas, uno tras otro, igualmente repletos. Unido a esto, las paradas sin acondicionar y el otro incumplimiento del servicio cómodo, seguro y confiable... ruido de toda clase; pasajeros que suben y ponen sus aparatos de sonido de toda índole al volumen que les viene en gana, vendedores de chucherías y salvación. Todos gritando, como diríamos, a todo pulmón, y los conductores, en minoría amables, como si fueran sordos... ni siquiera se inmutan; suficiente con pelear con los pasajeros que buscan colarse por la puerta de salida, más los que no se corren o no tienen paciencia para que los demás se acomoden. ¿HAY ESPERANZA?