Hay mucho en juego...

Lo más importante que, quizá, se juega el actual Gobierno es la credibilidad, lo cual, de perderla, principalmente, de parte de quienes depositaron no solo su voto por él, sino su fe y esperanza en mejores días, le hará muy difícil lo que resta de su gestión que, atentos, apenas comienza. La llamada alianza de gobernabilidad, está dejando mala impresión, pues lo que se percibe, es lo que hasta el menos listo intuía, es solo un juego de mesa, para seguir con lo de ‘juego’, en el cual se reparten fichas, cartas; y si no se reparten, hay pelea, alguien se levanta de la mesa y, en el mejor de los casos, la voltea patas arriba. Mientras... Justicia por lo pasado, y el alto definitivo a la corrupción, en lo inmediato, es lo que la sociedad espera. Que no se hagan ‘cosas’ buenas que parezcan malas. Que el Ejecutivo escuche, que no se repitan los yerros del pasado en ninguno de los órganos del Estado. Sin embargo, aún no se eliminan las partidas circuitales, pero sí vamos a sesiones extraordinarias. Se formó tal barullo en el periodo regular de la Asamblea Nacional que no tuvieron tiempo los honorables, historia vieja, de cubrir su agenda... Ya de por sí esos dos aspectos, como la lentitud en resultados contra corruptos, decepcionan.