Apuesta por el turismo

Si hay algo que preocupa a los panameños es la falta de circulante en la calle. Ahora con la JMJ, el circulante se mueve con mayor fluidez y muchos panameños, pequeños y medianos empresarios, están recibiendo los beneficios de esta actividad. Esta sola acción de la JMJ ha permitido que la economía fluya y tanto la capital como el interior del país se están beneficiando. Panamá es un gran atractivo turístico, pero hasta ahora no hay una política que fomente la llegada de turistas a gran escala. La coyuntura de la JMJ permite analizar cómo podríamos como país ensayar una estrategia para la llegada masiva de extranjeros. El turismo es la forma más fácil de que el dinero llegue a todos los rincones. Ayuda al pequeño agricultor, a los artesanos, a los raspaderos, a los dueños de fondas... Es una actividad que permite generar ingresos a mucha gente humilde, que les permite mantener la economía de sus hogares. Hasta hace unos días, la economía se sentía totalmente paralizada y la JMJ la ha hecho mover. Pasada la JMJ, el país sigue con la fiesta de Carnaval, otra actividad que logra que la economía fluya hacia las capas más bajas. Pero pasadas estas actividades, ¿cómo mantener la actividad turística en auge? Es aquí donde las autoridades tienen que planear una estrategia en conjunto con los operadores turísticos. Los dos últimos Gobiernos han priorizado en mantener la economía con la construcción de grandes obras. Esta decisión es positiva, pero paralelo a ello hay que fomentar el turismo a gran escala. Hay que aprovechar la ventana de la JMJ y las recomendaciones que dan los grandes medios a nivel internacional, como el New York Times y Vogue, para vender ese Panamá bonito, ese Panamá rural, ese Panamá que todos amamos. ¡Hay que apostar por el turismo!