La metamorfosis global

Aunque la utopía es un mundo de paz y cooperación entre todos, la realidad es que los intereses de las grandes potencias priman sobre las más débiles. Con el Canal, Panamá es una potencia mundial, aunque como sociedad no hayamos tomado la determinación de hacernos sentir con esa importancia geopolítica y permitamos que sigan humillándonos con listas de todos los colores. Hace un tiempo advertimos los ataques de Europa hacia este pequeño país y que nuestro mejor aliado debía ser Inglaterra. Hoy, las cosas van tomando un cariz interesante cuando vemos cómo se alían tres grandes en el mundo (Estados Unidos, Reino Unido y Australia), en una alianza denomina Aukus, que es la última apuesta de Washington para contrarrestar la presencia de China en la región indopacífica. No se trata de que Panamá deje de tener relaciones diplomáticas con los diversos países, sino de lograr aliados que a la hora de los ataques nos puedan ayudar a defender o, por lo menos, que, por tener esos aliados, los países lo piensen mejor antes de atacarnos. El mundo vive una metamorfosis y muchos de los que están arriba pueden quedar abajo y viceversa. Panamá tiene que tomar decisiones inteligentes y dejar de estar aguantando golpes sola, cuando puede y debe tener aliados que ayuden a esquivarlos. ¡Así de simple!