Un buen estudiante, tranquilo y algo introvertido, que fue monaguillo y empleado en un supermercado antes de alcanzar la fama. Esos son algunos retazos...
- 02/09/2011 02:00
PERIODISTA La caída del Muro de Berlín, la desintegración de la Unión Soviética, en la historia universal o en Panamá, las declaraciones de Eduardo Díaz Herrera, son ejemplos de esta irrfutable verdad: nadie puede hacerse con el título de propiedad de la realidad.
Los hechos simplemente suceden. Una vez que eso se da, lo demás es historia. Es casi hilarante ver como en medio de la actual crisis política del país, —la más grave en los últimos 20 años— han salido voces que intentan atribuirse ser los detonantes de la situación. Lo peor es que no lo son. Intentaron hacerlo al referirse a las publicaciones sobre el escándalo de Paitilla.
El diario La Prensa, intentó registrar como su propiedad las publicaciones sobre el citado escándalo. Sin embargo fue el diario Panamá América quien primero abordó el tema, no obstante estos reflejaron un cuento de hadas muy lejano de la realidad. La Estrella fue quien trató el asunto del negociado sobre el relleno de Paitilla primero, así que definir quien se atribuye haber disparado las diferencias entre los ex aliados en el gobierno es no solo insensato, sino muy complejo. Los medios no existen para adueñarse de los hechos. Entonces serían más un fin, que un canal de comunicación y reflejo de la sociedad. La realidad no tiene dueño así como las imágenes no pertenecen al espejo en que se reflejan.