I+D para enfrentar los desafíos globales

Actualizado
  • 30/04/2021 00:00
Creado
  • 30/04/2021 00:00
Garantizar el acceso al caudal de conocimiento, transferencia tecnológica y fondos es necesario para aprovechar el potencial de la I+D.
Durante la pandemia, la I+D ha aportado avances en epidemiología, virología e inmunología.

Se han dado avances en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), pero falta trabajar mucho más en la seguridad alimentaria, el deterioro ambiental y las desigualdades. La pandemia de covid-19 ha complicado el panorama.

Ante estos retos, los procesos de investigación científica y desarrollo tecnológico (I+D), que producen nuevos conocimientos y datos útiles para tomar decisiones y establecer políticas públicas, pueden contribuir a lograr las metas de los ODS.

“El gran desafío del desarrollo sostenible exige abordar de manera holística e interdisciplinaria los problemas del desarrollo económico, social y ambiental, no solo como problemas complejos en sí mismos, sino como inseparables”, plantea el ingeniero Francisco García, subdirector de Investigación Científica y Desarrollo Tecnológico (I+D) de la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Senacyt).

Trabajo de campo para el estudio de seroprevalencia de SARS-CoV-2 en Panamá.

En Panamá, el 75% de la población vive en las ciudades, ejerciendo presión por servicios como energía, agua y otros. La expansión demográfica amenaza la biodiversidad; la deforestación tiene una tasa anual de 1,12%, los caudales de agua han disminuido en 59% y la contaminación por aguas residuales se sitúa en 53%, la erosión o las inundaciones están en el 65%, el 27% de los suelos está degradado, y el país es el mayor consumidor de agroquímicos en Centro América, con 11,5 toneladas por cada 1,000 hectáreas de área agrícola. El cambio climático es otra amenaza.

“A través de convocatorias de I+D, la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Senacyt) ha impulsado una diversidad de proyectos orientados al desarrollo sostenible, que abordan problemas como: agua, gestión de riesgo, salud, energía, sistemas productivos, dinámica y participación sociales”, añade el ingeniero García.

“Los fondos y proyectos de I+D ayudan a resolver problemas ambientales, de salud pública y conservación de la biodiversidad porque, generalmente, son multidisciplinarios e involucran a la gente local”, considera el doctor Pedro Méndez-Carvajal, director de la Fundación pro Conservación de los Primates Panameños e investigador asociado de la Estación Científica Coiba AIP.

Iniciativa 'Ventiladores por Panamá'.

“Tomamos muy en serio la percepción que tiene la gente de los primates en su área. Las actividades que se ejecutan en la mayoría de los proyectos en esta línea tienden a buscar soluciones basadas en las necesidades cotidianas de las personas que viven cerca o están vinculadas a zonas agrícolas-boscosas. Se incentiva la educación ambiental y se promueve un uso amigable del ambiente en sus tierras, con la reforestación y seguimiento, monitoreo de fauna y de especies indicadoras”, añade.

Los monos son especies centinelas y la observación y vigilancia de sus poblaciones permite detectar descensos abruptos y epidemias para lanzar la alarma y mitigar posibles zoonosis y antropozoonosis, explica el doctor. Méndez-Carvajal.

“Además, la valoración de los ecosistemas con estudios de diversidad y el apoyo a proyectos de I+D ayudan a mejorar la resiliencia de los ecosistemas, la agricultura inteligente y la seguridad alimentaria, y están vinculados a instrumentos de gestión pública nacional e internacional, como diversidad biológica, cambio climático, desertificación, protección de humedales y metas AICHI”, subraya.

Lic. Karol Gutiérrez, de la FCPP, investiga el comportamiento alimentario de monos aulladores asociado a la química de las partes vegetales de su dieta.
Salud e innovación

La doctora Sandra López-Vergès, investigadora del Departamento de Investigación en Virología y Biotecnología del Instituto Conmemorativo Gorgas de Estudios de la Salud (ICGES), menciona que todos los grandes avances de salud y para mejorar la vida cotidiana vienen de la I+D y, en algunos casos, de la innovación. Un ejemplo reciente ha sido la respuesta a la pandemia del SARS-CoV-2.

“Gracias a la I+D, rápidamente se pudo secuenciar el genoma del virus, entender cómo funciona y detectar las variantes. Ha sido un gran avance para la epidemiología, la virología y la inmunología; podemos saber qué variantes escapan a la respuesta de anticuerpos de las vacunas o de infección previa. La I+D permitió crear diferentes kits de detección que nos ayudan a tener un diagnóstico más rápido y un mejor seguimiento de los casos positivos y de sus contactos”, explica la viróloga, y añade que “la creación de vacunas en varios países muestra la importancia de mantener una investigación básica fuerte para poder tener una investigación aplicada e innovar”.

En el ICGES se analizaron las muestras para el estudio de seroprevalencia de SARS-CoV-2.

Actualmente en Panamá hay 32 iniciativas de Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+i) en curso, financiadas por la Senacyt, para atender temas sanitarios y sociales a raíz de la pandemia.

Según datos del Foro Económico Mundial, la innovación es crucial para una economía más justa, para enfrentar el cambio climático y la pandemia. La I+D puede conducir hacia una nueva era de crecimiento económico y sostenible.

El informe Panorama de la efectividad del desarrollo 2018 del Banco Interamericano de Desarrollo plantea que “la innovación es un impulsor clave de la Agenda 2030, porque cumplir el ODS 8 (Trabajo decente y crecimiento económico), el ODS 9 (Industria, innovación e infraestructura) y otros, requiere idear nuevas soluciones para problemas arraigados en Latinoamérica y el Caribe”.

Cifras del Instituto de Estadística de la Unesco revelan que la inversión global en I+D ha alcanzado casi $1,7 billones y que unos 10 países representan el 80% de las inversiones. Entre los que más invierten están Corea del Sur, Japón y Suiza.

La sociedad panameña, en general, reconoce la importancia de la I+D en el devenir nacional, dice el ingeniero García. “Se hace evidente en la última encuesta desarrollada por el Cieps, donde la investigación científica aparece como la tercera actividad presupuestaria en la que el gobierno debe invertir”.

No obstante, se han identificado debilidades como la escasez de financiamiento, capital humano de alto nivel escaso y no dedicado a I+D+i, y pocas instituciones con políticas y planes de investigación o innovación explícitas en relación con lineamientos de las actividades de I+D.

I+D para enfrentar los desafíos globales
Algunas metas para 2030
Proyectos

Aumentar las inversiones en investigación agrícola y servicios de extensión, el desarrollo tecnológico y los bancos de genes de plantas y ganado.

Apoyar actividades de I+D de vacunas y medicamentos para enfermedades transmisibles y no transmisibles.

Aumentar la cooperación internacional para facilitar el acceso a la investigación y la tecnología relativas a energía limpia.

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