Epistemología del turismo y la urgencia de una unidad académica en la Universidad de Panamá

  • 06/07/2025 00:00
La creación de una unidad académica en turismo es una necesidad ineludible si se desea avanzar hacia una formación universitaria pertinente, crítica y comprometida con los desafíos del desarrollo nacional

En el cambiante panorama del siglo XXI, la epistemología del turismo emerge como un campo crucial para la redefinición del conocimiento académico; y establece un diálogo con las necesidades prácticas del desarrollo sostenible, la identidad cultural y la economía global. Este artículo explora los vínculos entre epistemología y turismo desde una perspectiva académica y crítica, con énfasis en la necesidad de crear una unidad académica especializada en turismo en la Universidad de Panamá.

Desde su raíz etimológica, la epistemología —entendida como el estudio del conocimiento científico— permite cuestionar las bases sobre las cuales se construyen las disciplinas, los saberes y sus prácticas (Briones, 2002). En el caso del turismo, este ejercicio se torna especialmente relevante, pues se trata de un campo en permanente transformación, interdisciplinario y atravesado por dimensiones económicas, sociales, culturales, políticas y ambientales.

Contexto internacional y nacional

El turismo es una actividad estratégica para el desarrollo. En 2022, la Organización Mundial del Turismo (OMT) reportó 965 millones de llegadas internacionales, un crecimiento importante respecto al periodo pandémico, aunque aún distante de las cifras previas a 2019. La contribución del turismo al PIB mundial, según el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC), se estima en más de USD 7 billones, sustentando aproximadamente 290 millones de empleos (Tourism Economics, 2021).

Panamá no escapa a esta realidad. En 2019, los ingresos turísticos directos alcanzaron USD 3.300 millones, y el impacto total, considerando efectos indirectos e inducidos, ascendió a USD 9.000 millones, representando el 13 % del PIB nacional y respaldando 285.000 empleos (Tourism Economics, 2021). Estos datos evidencian que el turismo es más que recreación: es un vector de desarrollo económico, social y cultural.

Impactos socioculturales y ambientales: una mirada crítica

Sin embargo, la expansión del turismo no está exenta de tensiones. En el plano sociocultural, los estudios han mostrado cómo la interacción entre comunidades anfitrionas y turistas puede derivar en procesos de valorización cultural o, en su defecto, en erosión patrimonial y conflictos identitarios. El reto, es articular políticas de turismo que promuevan la inclusión de las comunidades locales desde la planificación, manteniendo la identidad, cultura y tradiciones, además de la sostenibilidad en términos ambientales.

En cuanto al ambiente, la noción de turismo sostenible, tal como fue formulada por la OMT (2001) a partir del informe Brundtland (1987), exige una gestión de recursos que satisfaga necesidades presentes sin comprometer las futuras. El turismo, por tanto, debe pensarse en términos de resiliencia ecológica, planificación territorial y justicia intergeneracional.

El turismo como disciplina académica

Ahora bien, si el turismo es una práctica social compleja, también es un campo de estudio que requiere una definición clara de sus objetos, métodos y propósitos. En este sentido, la ontología del turismo —es decir, la pregunta por su esencia— resulta fundamental. ¿Qué es el turismo? ¿Qué lo constituye como fenómeno humano y económico? ¿Cómo se vincula con nociones como identidad, territorio, movilidad, ocio, deseo o consumo?

A partir de estas interrogantes surge la necesidad de una ontología académica del turismo, que oriente los marcos teóricos y metodológicos desde los cuales se lo estudia. Tal como señalan autores como Panosso Netto (2007), Beni (2019) y Mora et al. (2020), el turismo es un campo fragmentado, con fuertes componentes administrativos pero escasa articulación interdisciplinaria.

La creación de una unidad académica permitiría superar esta fragmentación y dotar de coherencia al cuerpo teórico, una estructura metodológica y debate constante de una disciplina como el turismo; además de estructurar áreas de conocimiento en una disciplina que permita, generar, investigación, docencia y extensión

Epistemología del turismo: hacia una estructura conceptual clara

Si la ontología plantea el “qué”, la epistemología del turismo se interroga por el “cómo” del conocimiento: ¿cómo se construye el saber turístico? ¿Desde qué paradigmas se investiga? ¿Qué metodologías se privilegian? ¿Qué intereses están en juego?

Autores como Briones (2002) recuerdan que la epistemología permite identificar los fundamentos lógicos, históricos y sociales del conocimiento científico. En el caso del turismo, este ejercicio implica reconocer que no existe una única manera de conocer, y que las aproximaciones pueden ser diversas: sociológicas, económicas, antropológicas, ecológicas, políticas entre otros.

Desde esta óptica, la epistemología del turismo no es un lujo teórico, sino una necesidad práctica. Sirve para definir objetivos académicos, establecer criterios de evaluación, identificar vacíos en la formación y orientar líneas de investigación pertinentes. En palabras de Wallingre (2011), se trata de formar profesionales con una visión crítica, integral y contextualizada.

Justificación para la creación de una unidad académica en turismo

A partir de este marco teórico-conceptual, se proponen al menos tres argumentos sólidos que justifican la creación de un departamento de turismo en la Universidad de Panamá:

Relevancia económica y sociocultural del turismo: La magnitud del impacto económico y el dinamismo del turismo en Panamá exigen una formación profesional especializada, que atienda tanto a la gestión como a la innovación, la sostenibilidad y la planificación participativa. Además, de la necesaria dimensión investigativa del “hecho turístico”, desde las diferentes disciplinas que aportan a esta área académica.

Complejidad interdisciplinaria: El turismo articula saberes provenientes de la geografía, la sociología, la economía, la antropología, la historia, política entre otros. Una unidad académica permitiría coordinar esta pluralidad desde un enfoque integrado y reflexivo, que permita aportar con hallazgos de investigación a la observancia, monitoreo de la condición turística del país y la región, además de recomendar acciones de política publica y fortalecer las mallas curriculares adecuadas a la realidad y exigencias del país.

Necesidad de calidad y pertinencia académica: Actualmente, muchos programas en turismo presentan currículos desarticulados o excesivamente pragmáticos. La creación de un departamento podría corregir esta tendencia, incorporando formación epistemológica, investigación aplicada y articulación con el sector productivo. Además de perfiles profesionales adecuados a la multidimensionalidad del turismo como disciplina.

Modelos internacionales de referencia

Al considerar experiencias internacionales, encontramos que universidades como la UNAM, el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), y la Universidad de California ofrecen programas robustos en turismo, con énfasis tanto en la administración como en el desarrollo territorial y la sostenibilidad. Estas instituciones han comprendido que el turismo requiere de una base académica sólida, capaz de responder a los retos del presente.

Metodología y enfoques sugeridos

Desde el enfoque cualitativo y hermenéutico, el análisis epistemológico del turismo en Panamá permite comprender no solo el objeto de estudio, sino también las condiciones sociales y académicas que hacen necesaria una unidad universitaria dedicada al turismo. La comprensión de este fenómeno se vincula tanto al estado del arte como a la reflexión crítica sobre la institucionalidad del conocimiento.

Consideraciones finales

En conclusión, la creación de una unidad académica en turismo en la Universidad de Panamá es una necesidad ineludible si se desea avanzar hacia una formación universitaria pertinente, crítica y comprometida con los desafíos del desarrollo nacional. Esta propuesta no solo busca formar profesionales técnicamente competentes, sino ciudadanos capaces de comprender el turismo como un fenómeno social, económico, cultural y ambiental profundamente transformador.

Al apostar por la epistemología del turismo, Panamá puede situarse a la vanguardia en la formación de profesionales con capacidad analítica, sensibilidad intercultural y compromiso con el bien común. La universidad pública, como espacio de pensamiento y acción, tiene el deber histórico de liderar este proceso.

Hoy la epistemología del turismo es un debate ausente que ha traído la consecuencia de la fragmentación administrativa de esfuerzos de una disciplina central con sus propias dinámicas y áreas establecidas que la componen como una unidad única de conocimiento con los aportes respectivos de muchas ciencias.

La autora es Profesora de la Universidad de Panamá y Especialista en Turismo

Pensamiento Social (PESOC) está conformado por un grupo de profesionales de las Ciencias Sociales que, a través de sus aportes, buscan impulsar y satisfacer necesidades en el conocimiento de estas disciplinas.
Su propósito es presentar a la población temas de análisis sobre los principales problemas que la aquejan, y contribuir con las estrategias de programas de solución.
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