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- 21/06/2011 02:00
PANAMÁ. A las mujeres les atraen los hombres orgullosos y arrogantes. Mientras que ellos las prefieren felices, según un estudio científico de la Universidad de British Columbia, en Canadá.
Las féminas quedan rendidas a los pies de un caballero con estas características porque les inspira seguridad y temple para liderar una relación. En tanto que aquellos que muestran una sonrisa inmensa y hacen derroches de alegría son tomados como faltos de dominio; es decir, débiles de personalidad. Incluso los tímidos y los avergonzados tienen más oportunidades que ellos. En la escala de atracción se mantienen tras los arrogantes y orgullosos.
Contrario a lo que hasta ahora se pensaba, la sonrisa de los hombres durante la primera cita no seduce para nada a las damas. De acuerdo con la psicóloga Jessica Tracy, de la Universidad de British Columbia, en Canadá, que lideró este trabajo científico, una sonrisa es importante para lograr las buenas relaciones sociales; sin embargo, esto no significa que tiene que ser atractiva.
En los hombres la situación es inversa. A ellos sí les gusta verlas sonreír. Se vuelven locos. Esta es la mejor carta de una mujer para enamorarlo.
Pero si quieres otra opción de conquista, las avergonzadas se encuentran en el segundo rango de atracción. Pero las que no levantan los suspiros del sexo opuesto son aquellas damas que se muestran jactanciosas y confiadas en sí mismas. Estas no les resultan atractivas para nada. Se quedarán solteronas si no cambian de actitud.
Sin duda, esta nueva investigación podría cambiar la estrategia de conquista tradicional de los caballeros que más que todo se enfatiza en crearle una idea de deidad a la mujer que lo atrae. Casi siempre durante el periodo de cortejo todo es alegría y felicidad. Hasta ahora se creía que esta era la forma más eficaz de llegar al corazón de una mujer, pero este estudio demuestra lo contrario, según el artículo publicado en el portal digital del diario BBC Mundo.com.
LA RECOLECCIÓN DE DATOS
La investigación, que fue publicada por la revista Emotion, de la Asociación Psicológica, demuestra que las personas reaccionan de forma distinta a las manifestaciones emotivas, incluyendo las sonrisas, detalló la psicóloga.
Para determinarlo los especialistas evaluaron la relación entre la atracción sexual y las emociones. Se evaluó la felicidad, el orgullo y la vergüenza con la participación de casi mil adultos sometidos a cientos de imágenes sexuales. Una de ellas, por ejemplo, mostraba algún adulto del sexo contrario haciendo un despliegue de alguna emoción. Con esto se buscaba la reacción instintiva sobre la atracción carnal y sexual.
LAS SORPRESAS
Los resultados sorprendieron a los investigadores. Nunca imaginaron que para las damas las sonrisas de los caballeros significaran falta dominio. Mucho menos creían que la emoción que genera menos problemas entre ambos sexos es la vergüenza, que tiene un rango regular de atracción sexual. La psicóloga considera que este sentimiento se relaciona con el conocimiento de las normas sociales y los comportamientos que causan confianza en los seres humanos. Esto explica porque la vergüenza tuvo un nivel aceptado entre ambos sexos: ambos prefieren tener a su lado personas en las quienes pueden confiar.