Mujeres que halan la carreta

S i es una de esas mujeres y madres que trabajan dentro y fuera de casa y ahora, además de cuidar a sus hijos, se ocupa también de sus mayores, entonces, bienvenida a la ‘generación sandwich ’. ¡Es quizás la más difícil! Pero le contamos cómo evitar sobrecargas innecesarias. Como nos explica la psicóloga y escritora María Jesús Álava, las mujeres llevan una vida imposible: “Se levantan mucho más temprano de lo que su descanso necesita y, antes de ir a su trabajo, realizan una jornada completa. Han despertado a los niños, preparado el desayuno, recogido la casa.. y todo eso sin parar, a contrarreloj. En el trabajo tienen que rendir tanto o más que la mejor y, de vuelta a casa: niños, ropa, compra, cena. Llegan a la cama reventadas, sabiendo que no van a dormir lo suficiente. Y en todo el día no han tenido ni un solo momento para ellas”.

Nos dice Álava que, aunque algunos lo llamen “liberación”, muchas mujeres lo viven como una “auténtica trampa”. Caen, más bien caemos, en el engaño de querer ser superwoman , la supermujer que llega a todo y pretende que, además, esté perfecto.

En conclusión: tiene que esforzarse más y la sobrecarga es excesiva”. Informes sobre la “liberación” femenina y estudios sobre la situación de la mujer actual confirman esta “falsa emancipación”. Es más, un dato importante revela que el 100% de las mujeres de entre 45 y 65 años, dedican seis horas diarias a las actividades relacionadas con el cuidado de los demás, mientras que sólo el 71% de los hombres lo hacen y su dedicación, en la mayoría de los casos, no alcanza las dos horas y media. ©ELPAIS.SL.