Se inicia éxodo de las mariposas

PANAMÁ. Las mariposas uranias fulgens viajan largas distancias desde México hasta Bolivia para encontrar bosques adecuados para la reproducción y sobrevivencia de sus crías.

Cada año, durante la estación seca, las mariposas emprenden un largo viaje de regreso hacia el norte. De hecho “ahorita mismo estamos viendo individuos solitarios en su viaje de regreso al norte”, explicó Alfredo Lanuza, biólogo del Instituto de Investigaciones Tropicales de Panamá (STRI, por sus siglas en inglés).

Muchas de las mariposas no soportan el viaje de regreso y mueren. Pero, lo más probable es que ya hayan cumplido su misión. Otras simplemente no pueden escapar de los peligros que para su vida representan los reptiles, mamíferos, arácnidos y aves.

Son muchos los retos que enfrenta este insecto nocturno con hábitos diurnos, para llegar a su destino final. Sin embargo, no cesarán en su intento por preservar su especie.

Un detalle que determina el viaje de regreso de la polilla es la migración solitaria.

Los individuos solitarios recorren las carreteras y caminos. Pero, en el mes de julio y agosto miles de mariposas en grupo sobrevuelan el país, un puente de encuentro para las especies, afirmó Lanuza.

El biólogo del STRI atribuye la migración a la amenaza que representa para la supervivencia de las orugas (crías de las mariposas) la toxicidad que desarrolla la hoja del bejuco, que sirve de huésped durante la vida del insecto.

Las hojas del bejuco ( Omphalea diandra ) sirven de alimento a las orugas. Pero, para evitar ser destruidas desarrollan mecanismos de supervivencia. Para protegerse, el bejuco aumenta la toxicidad de sus hojas, tanto es así que las orugas la comen y mueren.

Esto obliga a las mariposas a buscar bosques tropicales seguros, para la sobrevivencia de sus crías.

Las migraciones masivas de las mariposas colipato verde (nombre científico de las uranias fulgens ) se inician a partir de julio y agosto.

El espectáculo natural, que es evidente en la ciudad de Colón y Panamá, dura un mes dice Lanuza.

Las especies migran durante la estación lluviosa para reproducirse. Pero, buscan la estación seca para el viaje de regreso, explicó el biólogo ambiental experto en estudios de mariposas.

Las mariposas pueden volar grandes distancias a través de mar abierto. En el caso particular de Centroamérica la migración la hacen desde la costa Pacífica hacia el Caribe, según el sitio digital El Mundo de la biología.

Las poblaciones de esta especie tropical —negra con rayas verde tornasol— están disminuyendo drásticamente.

Lanuza atribuye el problema al impacto humano sobre los humedales y los bosques donde habita la especie tropical.

El hecho es lamentable por la importancia ecológica que tiene la presencia de las mariposas en los bosques. Las especies contribuyen al proceso de polinización de algunas plantas, son parte de la dieta de algunos animales y, además, son indicadores de salud de ambiental en un bosque. Y es que su presencia en un ecosistema boscoso puede indicar si el área está enferma o sana explicó el biólogo de STRI.

De hecho en las últimas décadas las mariposas ha servido de evidencia a los científicos sobre el cambio climático dice una publicación del sitio digital Castilla y León.

En Panamá existen una gran variedad de mariposas. Sólo en Galeta en Colón, donde Lanuza realiza sus investigaciones, se pueden encontrar alrededor de unas 60 especies.