FMI se suma a otras advertencias

PANAMÁ. El gobierno está al tanto de las advertencias que hizo el Fondo Monetario Internacional (FMI) a Panamá, para mantener estables la economía y las finanzas públicas, en el futuro.

Recientemente, el FMI pidió a Panamá una ‘política fiscal más restrictiva’. Para un grupo de expertos consultados, eso significa disciplina fiscal; es decir, un manejo prudente de los gastos y el déficit fiscal.

Sin embargo, el MEF lo interpreta como un consejo al gobierno panameño para que continúe con su ‘política de fortalecer el ambiente macrofiscal del país, es decir: un bajo nivel de déficit fiscal, continuar la reducción de su relación deuda pública’, entre otras cosas.

DÉFICITS

Durante la gestión de gobierno del presidente Ricardo Martinelli, en todos los años, los balances fiscales del Sector Público No Financiero (SPNF) mostraron déficit fiscales. Sólo en el 2013, el déficit fiscal del SPNF alcanzó la suma récord de $1,219.4, lo que representó un 3% del Producto Interno Bruto, casi en línea de lo que le permitía la ley de responsabilidad social y fiscal, de 3.1%.

Para el economista Adolfo Quintero, el problema se agudiza con el aumento del déficit fiscal de 3% del año 2013, y el déficit fiscal previsto de 2.7% para el 2014.

Para Quintero, ‘los organismos internacionales han observado la poca flexibilidad fiscal de Panamá para enfrentar desastres naturales y situaciones de ingresos fiscales adversos’. Es una voz de alerta. Están advirtiendo el riesgo al que el país puede verse expuesto si no se toman las medidas.

Para Raúl Moreira, presidente del Colegio Nacional de Economistas, ‘las recomendaciones del FMI se suman a los innumerables llamados de atención que desde hace mucho tiempo expertos locales y extranjeros han estado haciendo, con relación a la necesidad de una mayor prudencia en el manejo de las finanzas públicas del país’

Para el economista y catedrático Juan Jované, los riesgos de un deficiente uso de los recursos del Estado son altos. En el peor de los casos, la economía se podría desestabilizar si se reduce el ritmo de crecimiento y no hay capacidad para pagar los compromisos adquiridos.

‘La lógica indica que cuando la economía está boyante hay que hacer reservas para cuando se ponga dura la situación, pero esta administración ha hecho todo lo contrario. Hay que crear una política contracíclica’, dice Jované.