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Actualizado
- 21/01/2015 01:00
Creado
- 21/01/2015 01:00
Si la empresa no reanuda los trabajos a más tardar el 31 de enero, la ATP tomará medidas. El futuro del proyecto, en el limbo
La construcción del Centro de Convenciones de Amador está paralizada desde inicios de enero. La Autoridad de Turismo de Panamá (ATP) ha dado hasta el 31 de enero para que se retomen los trabajos; de lo contrario, ‘se tomarán medidas’, advierte el ministro de Turismo, Jesús Sierra, sin precisar cuáles serán éstas.
El titular de la cartera de Turismo explicó que las obras se han suspendido porque el grupo HPC-Contrata-P&V, S.A., que construye este megaproyecto, se encuentra en una reestructuración de su junta de accionistas. ‘Los temas económicos les competen a ellos y a su grupo. Nosotros necesitamos que se reanuden las obras a la mayor brevedad posible’.
Pero si esto no ocurre, ‘de seguro se van a tomar medidas, pero hay que esperar a que se llegue ese momento’, continuó explicando el funcionario de la ATP.
IMPORTANCIA
La culminación de la construcción del Centro de Convenciones de Amador apremia a las autoridades panameñas porque hay una cantidad de convenciones y congresos contratados para los próximos años.
Este proyecto nació como una iniciativa para incrementar la oferta turística del país a través de los congresos y convenciones. En este contexto también se lanzó al mercado una promoción del Centro de Convenciones Atlapa de manera gratuita que generó más de 100 mil noches de hotel al sector turismo.
El nuevo centro de convenciones estará ubicado en Amador, justo al lado del Museo de la Biodiversidad de Frank Gehry, y tendrá capacidad para realizar eventos que reúnan hasta 20 mil personas. También contará con un teatro, salón de exhibiciones y estará equipado con tecnología de punta, entre otros atractivos.
El proyecto, que se licitó bajo la modalidad de llave en mano, fue estimado en $193.7 millones y tendría que haberse entregado el 12 de octubre de 2014. Sin embargo, el gobierno anterior, otorgó a la empresa constructora una extensión del contrato hasta el 15 de diciembre de 2015. Hasta agosto de 2014, el avance de la obra era de un 35%.
Los otros dos proponentes que participaron en la licitación fueron la empresa brasileña Odebretch, que ofertó $239.5 millones, y el grupo mexicano Ingenieros Civiles Asociados (ICA), que propuso $148.6 millones.
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