Territorio panameño intervenido por pinchazos del DAS

PANAMÁ. El país vivió una semana agitada desde que el Gobierno Central admitió la solicitud de asilo que presentó la ex jefa del Departamento Administrativo de Seguridad en Colombia (DAS). La presencia de María del Pilar Hurtado en territorio panameño trajo consigo un batería de periodistas de medios internacionales que viajaron en busca de la información alrededor de una de las principales acusadas de las escuchas telefónicas a jueces, políticos y periodistas. La ex jefa del DAS se convirtió en la persona más buscada y Panamá parecía ser el escenario donde las víctimas de las ‘chuzadas’ seguirían la pelea en busca de justicia. Pero Hurtado no dijo una palabra. Abogados colombianos presentaron una denuncia para que María del Pilar Hurtado sea procesada en nuestro país por delitos de lesa humanidad. El ambiente seguía tenso, el lío de los pinchazos se apoderaba de Panamá.

Con la llegada del ex presidente Álvaro Uribe, que en Honduras se había negado a dar declaraciones respecto al escándalo que envuelve a su administración, y en Colombia solo se había remitido a un comunicado, subió la temperatura.

Las instalaciones del hotel Sheraton fueron sitiadas. Periodistas, simpatizantes y detractores de Uribe, todos en un solo lugar. El ex mandatario sí habló en Panamá. ‘Serví a Colombia con honor y amor y con la constitución en la mano’, fueron sus palabras al respecto.