Los independientes no llegan siquiera al margen de error

A poco más de un mes de las elecciones, los candidatos independientes a la Presidencia de la República no despegan. Casi no registran en las encuestas de preferencia del electorado.

La última encuesta ‘Panamá Opina’, realizada por la empresa Ipsos para ‘Telemetro’ y ‘La Estrella de Panamá’, del 19 al 22 de marzo, bajo la modalidad de simulación del voto con papeleta, no hubo casi variaciones en las candidaturas independientes.

Ni siquiera superan el margen de error. Apenas logran rebasar el cero en las preferencias electorales.

LOS NÚMEROS

Gerardo Barroso presentó un pequeño cambio, pasó de 0 a 0.1%; Juan Jované cayó de 1% a 0.2, mientras que Estaban Rodríguez no marca.

Según analistas políticos, el problema al que se enfrentan las candidaturas independientes es que no tienen trayectoria ni liderazgo.

‘Las candidaturas independientes que quedaron no tienen ningún peso político en este momento. Salvo por Jované, no tienen trayectoria a nivel nacional’, comentó el analista político José Blandón.

¿POR QUÉ NO CUAJAN?

A 39 días para que el pueblo panameño escoja a la persona que ocupará la silla presidencial a partir del 1 de julio, todavía hay posiciones encontradas en relación a las candidaturas independientes.

Para el economista y también candidato Juan Jované, el mayor obstáculo que se ha encontrado como independiente es la actitud poco democrática de todo el sistema panameño en contra de estas candidaturas. Mencionó que no los invitan a los debates.

‘Aquí nosotros vemos la fuerza de la partidocracia metida en todas las instituciones, incluyendo las universitarias. Lo que están es rehuyendo escuchar ideas distintas’, expresó.

ADAPTACIÓN

Para el analista político Mario Castro Arenas, es importante tener en cuenta que Panamá está en pininos en cuanto a candidaturas de libre postulación, por lo que al principio será difícil que el sistema y la sociedad se adapten rápidamente.

Desde su punto de vista, la mayor dificultad a la que se enfrentan los actuales candidatos independientes es que no cuentan con una plataforma o estructura nacional de apoyo, lo que sí tienen los partidos tradicionales.

El reclamo de los candidatos independientes es que no hay igualdad de condiciones con los partidos políticos.

Por eso, piensa Castro Arenas, ‘hay que encontrar una fórmula que permita que los independientes tengan, por lo menos, la posibilidad de competir en condiciones similares, porque si no, la figura morirá en su cuna’.

Otro aspecto que mencionó Jované es que el Tribunal Electoral, a su juicio, no es imparcial por la forma en que son escogidos los magistrados electorales. Según Jované, el método debe cambiar.

‘¿De dónde vienen los magistrados del Tribunal Electoral? De los partidos políticos. ¿Qué intereses defienden? Los de los partidos políticos. Entonces, de alguna forma u otra [hay que] empezar a regular esto y darle más participación a la sociedad civil’, analiza el también docente universitario.

En reiteradas ocasiones, tanto Barroso como Rodríguez denunciaron que las reglas del juego no son iguales para todos, empezando por el subsidio que recibieron del Tribunal Electoral, pues la suma es ‘irrisoria’, comparada con las de los partidos.